María Esther Gorostiza Rodríguez, más conocida como Analía Gadé, nacida en la ciudad argentina de Córdoba, debutó en el cine argentino con diecisiete años. Tras ganar un concurso de belleza, con la película La serpiente de Cascabel (1948) de Carlos Schliepper.
La actriz se especializó en comedias y protagonizó, entre otras, 'Operación Embajada' y 'Black story' (1963), en compañía de José Luis López Vázquez, o 'No Disponible' (1968), con Alfredo Landa, y junto a Sophia Loren 'Madame Sans-Gene' (1961).
En la entrega de los premios la actriz hizo gala de su vitalidad y su amor por el espectáculo y aseguró que le encantaría irse de esta vida teniendo relación con el cine, que es lo que más le gusta.
CHANCE (CH): Déjeme darle la enhorabuena por este premio
ANALÍA GADÉ (A.G): Muchas gracias, yo estoy encantada, por supuesto.
CH: ¿Qué significa para usted?
A.G: Un premio, pero significa mucho porque a estas alturas del partido me den un premio es maravilloso, significa muchísimo.
CH: ¿Qué momento recuerda con más cariño?
A.G: Después de tantos años el que recuerde con más cariño no sé... Son muchos años de carrera así que tiene que haber varios premios y varios momentos muy agradables. Desde el año 47 que empecé a trabajar en esto del cine y del teatro y de la televisión así que no sé, he pasado momentos maravillosos.
CH: Toda una vida dedicada al espectáculo...
A.G: Sí, si toda una vida.
CH: ¿Cómo ha cambiado el cine desde que empezó hasta ahora?
A.G: Muchísimo, ha cambiado muchísimo, pero para bien. Ahora te pasas al cine y te sientas a ver una película y es muy bonito.
CH: ¿Cuál es la espinita de algún papel que te hubiera gustado hacer?
A.G: No sé, todavía pienso que lo puedo hacer...
CH: Claro para que se lo propongan.
A.G: No me lo van a proponer. Hay muchos papeles para hacer. Sobre todo para hacer cosas de la vida real, antes se hacían cosas muy inventadas y hoy en día hacemos películas sobre la vida real.
CH: ¿Tienes ganas de seguir trabajando?
A.G: Sí, es un oficio que hasta el último momento seguiré interesada en él y seguiré pensando en el papel que me ofrecerán dentro de unos años.