En el barrio de la Salud, de Badalona, hay quien ha llevado el negocio mucho más allá. La crisis y el aumento de viviendas embargadas por los bancos han hecho que muchos pisos estén vacíos. Y ante esta situación, algunos han decidido apoderarse de estas viviendas mediante la conocida "patada en la puerta", es decir, ocupándolos ilegálmente, para después realquilárselos a los más desfavorecidos.
Said es el inquilino de uno de estos pisos. Son 30 metros cuadrados de vivienda en la que viven los ocho miembros de su familia. No sabe quien es el dueño de la casa. "Yo le pago a un chico de Rumanía, 300 euros, pero no sé quien es el dueño". Nos explica que lleva un año sin trabajo, y que no puede pagar nada mejor.
Pero no sólo las viviendas se realquilan de manera ilegal. Los locales comerciales cerrados también se han reconvertido en improvisadas viviendas... con caseros desconocidos. Entramos junto a los vecinos de la Salud a uno de estos locales. "Nosotros pagamos a un chico de Pakistán... 1500 euros. Él viene y le damos el dinero, habla mal español, no sabemos si es el dueño". En el local se han levantado varias habitaciones entre las que se reparten 3 familias. En total: 14 personas.
Los vecinos aseguran que el aumento de estas casas patera han ido en paralelo al aumento de la delincuencia. "La mayoría de ellos, no trabaja, pero todos comen ¿Cómo te lo explicas?" se pregunta Manolo, quien lleva 44 años viviendo en este barrio. Asegura que ahora está peor que nunca, que en cada bloque hay al menos uno de estos pisos y que empienzan a estar, hartos de denunciarlo.
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