Querían una boda de ensueño en un paraje de Turquía, pero todo quedó truncado cuando una intoxicación alimentaria postró a los propios novios e invitados en la cama de un hospital.
Kevin Sturman, de 33 años y Abbie Nutria, de 30, enfermaron junto a sus familiares y allegados nada más hospedarse en el hotel que habían elegido para la celebración.
La pareja había contratado la boda y un viaje de dos semanas en el hotel Holiday Village en la localidad turca de Sarigerme, a una agencia de viajes por más de 4.500 euros.
La ceremonia, según publica el diario británico Daily Mail, se celebró pese a los problemas de salud de los invitados que presentaban vómitos, gastroenteritis y diarrea, entre otros..
La hermana del novio, y dama de honor del enlace, fue trasladada al hospital donde pasó varios días ingresada para tratar la gastroenteritis y deshidratación que padecía.
"Fue una pesadilla absoluta", según ha declarado el propio novio tras los hechos. EPF