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La tripulación de la Estación Espacial de China, Tiangong (que significa “Palacio celestial”), que se completó recientemente con el ensamblaje del último módulo, ha realizado su tercera caminata espacial. Duró alrededor de cinco horas y media, en las que los astronautas salieron de la estación al exterior.
Esta ha sido la séptima caminata espacial en la Estación Espacial China y la tercera para la tripulación del Shenzhou 14. Chen Dong y Cai Xuzhe se aventuraron a salir, mientras que el otro integrante, Liu Yang, se quedó dentro de la estación. Durante la caminata completaron varias operaciones.
"Y en comparación con paseos espaciales anteriores, tenemos la sensación de que los dos astronautas que trabajaban juntos estaban particularmente sincronizados, ya que cooperaban en sus tareas”, ha dicho Huang Weifen, diseñador jefe de sistemas de astronautas en el Centro de Astronautas de China, recoge CGTN.
“La eficiencia ha mejorado. Esta es también la primera vez que nuestros astronautas realizan un paseo espacial a bordo de este módulo de tres en la Estación Espacial”.
Su tarea era clave para las operaciones que los astronautas chinos (llamados taikonautas) realizarán a bordo de la estación: debían instalar equipos para conectar los módulos.
"La tarea más importante del día es instalar el equipo de enlace entre módulos. Sin este equipo, los taikonautas no pueden moverse por sí solos del módulo Wentian al núcleo de Tianhe (o módulo Mengtian), señala Li Wei, de la Academia de Tecnología Espacial de China (CAST).
La Estación Espacial de China, un laboratorio en órbita para miles de experimentos
Se espera que la estación, el segundo laboratorio en órbita junto con la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés), albergue más de 1.000 experimentos científicos durante su vida útil de al menos 10 años. Estos incluyen el estudio de los efectos de la microgravedad en los tejidos vivos y el comportamiento de los incendios.
Actualmente, hay ya en marcha más de 25 proyectos de investigación, incluidos aquellos para estudiar los efectos de la microgravedad en las células vegetales, los huesos y los músculos, así como en los materiales fundidos, junto con experimentos de cristalización de proteínas, según la revista Nature.
Los medios de comunicación estatales chinos también informaron que la tripulación llevó unas 12.000 semillas, incluidas semillas de alfalfa, avena y hongos, a la estación espacial, exponiéndolas a la radiación cósmica y la microgravedad durante seis meses, antes de devolverlas en abril para plantarlas en la Tierra.
Investigadores de la Academia de Ciencias de China también informaron que las plántulas de arroz y berro thale cultivadas en Wentian a fines de julio comenzaron a brotar.