Terror en el hipermercado: ¡¿y nuestro Cacaolat?!

INFORMATIVOS TELECINCO / AGENCIAS 08/04/2011 16:40

"Bajo ningún concepto se ha dejado ni se va a dejar de suministrar a los supermercados el batido de Cacaolat", ha garantizado Masdeu, quien ha sostenido que el concurso de acreedores presentado por la compañía tiene como objetivo dar viabilidad a la marca. De hecho, Proactiva, el fondo inmobiliario que posee los terrenos donde se levanta la fábrica de Barcelona de este producto, quiere deshauciar a Cacolat por no pagar el alquiler.

También ha señalado que Cacaolat es rentable y solvente, por lo que la compañía no quiere renunciar al 60% de cuota de mercado que posee en el canal de la alimentación, como tampoco al 99% que tiene en restauración, según Masdeu.

"Llevamos cuatro generaciones alimentando las ilusiones de nuestros consumidores y nuestro objetivo es seguir haciéndolo", ha remachado. Cacaolat presentó el pasado 17 de marzo concurso voluntario de acreedores y el juez de lo mercantil de Barcelona lo admitió, manteniendo tanto la gestión como la administración de la compañía, con un pasivo de 25 millones de euros, según datos de 30 de noviembre del año pasado.

De mano en mano

Este batido fue creado por Joan Viader Roger, hijo de Marc Viader Bas, un industrial que había fundado Letona en 1925.

Surgido de su estancia en Hungría, el pequeño Viader pronto vio claro el negocio: una "bebida nutritiva refrescante", elaborada a partir de leche desnatada, cacao y azucar.

La empresa retomó su actividad en 1950, después del parón de la Guerra Civil, y en 1971 fue comprada por Clesa y, treinta años más tarde, por Parmalat.

En 2007 se produjo otro cambio de accionariado, al entrar en él Nueva Rumasa. La firma anunció en 2009 que escindirá Cacaolat de Clesa para que ésta pase a ser una marca independiente, con la intención de que cotice en Bolsa, cosa que no cristalizó.

A comienzos de 2011, Nueva Rumasa tenía una deuda de 700 millones de euros y Clesa suspendió pagos. Desde entonces, Cacaolat tiene serios problemas para mantener su modelo de negocio.

Asentada en Cataluña y Aragón

La firma está muy ligada al Levante español. De hecho, el Gobierno de Aragón y la Generalitat de Cataluña anunciaron hace un mes se coordinarán para tratar de salvar las plantas de Cacaolat de las dos comunidades autónomas. Así lo ha asegurado el consejero de Industria, Turismo y Comercio del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, en declaraciones a los medios de comunicación en la capital aragonesa, después de reunirse con los representantes de los trabajadores de la planta de Utebo, que tiene cerca de 150 empleados.

El consejero ha indicado que la planta de Barcelona, que emplea a 300 personas, y la de Zaragoza, "están bastante relacionadas en materias primas y productos, son dos plantas muy complementarias: aquí hacen los brick y en Barcelona los botellines y botellas", de manera que "la situación afecta al grupo al completo porque hay una imagen de marca en el mercado y, si no se resuelve la situación, se sustituye por otra y todo se vuelve mas complejo".

"La Generalitat dice que vamos a estar perfectamente coordinados, se reunieron ayer con la Dirección de la empresa y ahora hay que ver qué medidas se pueden articular para ver lo que se puede paliar, aunque están en una situación de preconcurso y hay cuestiones jurídicas. Vamos a estar coordinados porque tenemos la misma preocupación es una industria complementaria y hay que salvar la marca", ha aseverado.

Por el momento, las neveras de estos consumidores respiran tranquilas.