El futuro de Internet: ¿Contenidos gratuitos o accesos de pago?

ELENA POSTIGO FERNÁNDEZ 27/04/2011 14:15

El futuro es impredecible, sin embargo, la industria audiovisual ya explora y estudia los potenciales negocios y las nuevas oportunidades que brindan las nuevas tecnologías.

Creadores y usuarios se han dado cita en una jornada, organizada por el Instituto del conocimiento, la digitalización y el emprendedor audiovisual (ICDEA), que ha pretendido buscar los puntos de encuentro entre las partes para el futuro más inmediato.

Algunos como el recién nombrado nuevo presidente de la Academia de Cine, Enrique González Macho, han abogado por "buscar un modelo sostenible y atractivo para el consumidor" que "acorrale a quienes nos han estado expoliando".

En ese sentido, González Macho, ha señalado que "a día de hoy no hay un marco legal idóneo para que Internet sea el futuro" aunque ha alabado y ha agradecido la reciente aprobación de la llamada ley Sinde.

Así, el máximo responsable de la Academia, que ha reconocido que "estar en contra de Internet es absurdo", ha resaltado que el futuro de la Red pasará por los contenidos de pago. "Internet cada vez será más de pago, igual que la televisión. Deberá haber precios asequibles y así la Red se convertirá en nuestro gran aliado", ha señalado.

Sin embargo, otros como el nuevo vicepresidente de Desarrollo Corporativo de Tuenti, Sebastián Muriel, se han mostrado en contra de la generalización de los contenidos de pago.

"No creo en el Internet de pago. Por su naturaleza, la Red será un lugar de convivencia abierta donde el mayor contenido será de valor y, lógicamente habrá que monetizar de alguna manera pero creo que habrá modelos mixtos. Si Internet fuera de pago no tendía ningún sentido", ha sentenciado.

El sector está en plena transformación y, según Muriel, es necesario "ir interpretando los cambios sociológicos" de los internautas para irse adaptando a los nuevos tiempos.

Internet es el futuro, pero nadie sabe con que letras se escribirá el camino que queda por recorrer en el cambiante mundo de las nuevas tecnologías. Lo que parece estar claro es que todos los agentes deben aunar esfuerzos para encontrar la mejor fórmula en la que todos deben salir ganando. ¿Será posible?