En este sentido, S&P, que ha comparado a los siete principales incumbentes europeos, ha indicado que Telefónica tiene el perfil de crédito más débil, mientras que, por el contrario, Belgacom posee la mayor fortaleza crediticia.
En concreto, la agencia de calificación mantiene la nota de solvencia a largo plazo de Telefónica en 'BBB' debido a las intensas presiones a las que se enfrenta la operadora española en el mercado doméstico.
En este sentido, S&P ha indicado que los operadores tradicionales de telecomunicaciones integrados en el Oeste de Europa se enfrentan a grandes diferencias en cuanto a la fortaleza de sus economías nacionales, la competencia de redes alternativas o nuevas, así como su grado de expansión geográfica.
Para la agencia crediticia, algunas diferencias claves, como la fuerza de los Estados soberanos, así como sus niveles de deuda y liquidez, representan gran parte de la divergencia en las calificaciones y rendimiento de estas compañías, que va desde ratings de 'A' a calificaciones de 'BBB'.
Así, para S&P Telefónica y Telecom Italia mantienen los perfiles de riesgo financiero más bajos debido a un mayor impacto potencial que sus homólogos respecto a la debilidad de sus mercados soberanos y el coste y acceso a los mercados de capital.
Por lo general, las operadores incumbentes disfrutan de una importante base de clientes de telefonía fija y móvil, marcas fuertemente establecidas, así como una extensa cobertura de su red y economías de escala.
Asimismo, la agencia ha señalado que la principal barrera para los nuevos participantes de estas mercados responde a las enormes inversiones requeridas para replicar las redes existentes y las marcas establecidas por parte de los operadores con poder significativo en los distintos mercados.