Alanis Morissette contagia de rock por una noche a la ciudad de la samba

EFE 05/02/2009 05:12

Con una sencilla puesta en escena, tan solo un telón de fondo con motivos orientales, Morissette comenzó el recital en Río de Janeiro de cuerpo ausente aunque con de voz presente, llenando cada rincón del auditorio mientras la banda caldeaba el ambiente.

Pocos segundos después y con los primeros acordes de "Uninvited" quiso dejar claro que ni su potente e inconfundible voz ni su espíritu rockero han perdido vigencia con el paso de los años.

Con la guitarra al hombro durante la mayoría del concierto y su inseparable armónica, la cantante hizo pocas concesiones al material de su último disco, "Flavors of entanglement", y muchas, en cambio, a las viejas canciones que la convirtieron en un icono en la década de los noventa.

No faltaron, como era de esperar, muchos de los temas que en 1995 convirtieron su disco "Jagged Little Pill" en el álbum de debut más vendido de la historia y la encumbraron en lo más alto de la escena musical con tan solo 21 años.

"Head over feet", "All I really want", "Not the doctor" o "You oughta know", volvieron a sonar una vez más en vivo ante un auditorio que demostró con sus coros que no olvida cada uno de los versos escritos por la canadiense años atrás.

Un repertorio breve pero intenso, con un peso importante de sus canciones más eléctricas y rockeras.

Tras "Tapes", de su más reciente álbum, un último bloque con los músicos rodeándola en el escenario que sirvió para escuchar en formato acústico temas como "Hand in my pocket" o "Everything".

Después, los indispensables bises y con ellos, de nuevo, vuelta a los orígenes con "You Learn" y, especialmente, con "Ironic", que sonó con la misma fuerza y rabia con la que fue escrita y con la solidez que imprime a las canciones una carrera de más de quince años en la música.

Como viene siendo habitual, Morissette volvió a pisar el escenario una última vez para cantar "Thank you", un himno de agradecimiento para despedirse del público carioca.

Fueron en total poco menos de dos horas de recital que supieron a poco pero que sirvieron, al menos, para que la artista reivindicase su papel como una de las voces de referencia de la última década por méritos propios.

El tour de presentación de "Flavors of entanglement" pasó en 2008 por Europa y Norteamérica y, desde el pasado mes de enero, la artista está inmersa en una minigira por Brasil que ya le llevó a actuar en Manaos, Brasilia, Fortaleza, Teresina, Recife, Salvador, Sao Paulo y ahora Río de Janeiro.

Las ciudades de Belo Horizonte, Florianópolis y Porto Alegre serán las próximas citas brasileñas del tour antes de que abandone definitivamente el país en dirección a Argentina y México.