Ante los miles de jóvenes espectadores reunidos en la sala SonarClub, el trío de Baltimore ha iniciado su actuación con "My girls", uno de sus temas más influenciados por el estilo de la escuela de House de Chicago de los años 80.
El ecléctico líder de la banda, que toca el teclado, la batería, el bajo eléctrico y la tabla de mezclas, y además ejerce también de vocalista, ha liderado la actuación de Animal Collective, en la que han presentado su aclamado último disco, el octavo de su carrera, "Merriweather Post Pavilion".
Grupo clave de la primera década del siglo XXI y uno de los proyectos musicales más admirados de los últimos años, Animal Colective destaca por su discografía sólida y variada, que mezcla el rock experimental con la electrónica, pero manteniendo siempre ciertas señales de identidad, como su pasión por el folk primitivo y su capacidad de encontrar sonidos irreconocibles.
En la sala Sónarpub, la sueca Karin Dreijer Andersson, alias Fever Ray, ha presentado, con una elegante puesta en escena de luz y color, los temas de su primer proyecto en solitario, tras su trabajo previo como The Knife junto a su hermano, caracterizados por un estilo temperamental que combina los instrumentos acústicos y electrónicos.
La artista sueca ha estado precedida en el escenario por el pinchadiscos español Ángel Molina, uno de los clásicos de la música electrónica nacional.
El plato fuerte de la última noche del Sónar es la esperada actuación del dúo británico Orbital, que cinco años después de su disolución, vuelven con sus grandes éxitos electrónicos a los escenarios del Festival de Música Avanzada, que ya visitaron en 1995 y 1999.
En la última jornada de Sónar Día, celebrada en la zona de la plaza de Els Àngels, han destacado el alemán Alva Noto y la última sensación británica Ebony Bones, de la generación de talentos emergentes que se sirven de internet para su difusión, que ha mostrado su estilo postpunk colorista y bailable.
Alva Noto ha presentado su nuevo trabajo, "Xerrox vol. 2", en el que hace muestra de su estilo minimalista y experimental que ha ido desarrollando en los últimos veinte años.
El público del Sónar es, un año más, heterogéneo y multicultural, donde se dan cita personas de todo el mundo, desde Reino Unido, Francia, Alemania y Suecia, pasando por Estados Unidos, Japón y Australia. El público local y nacional sigue apostando, por eso, por el festival, representando un 50% de los asistentes.
A pesar de la crisis, la organización prevé la noche del sábado congregue mayor número de espectadores que en 2008, cuando 17.828 personas acudieron a la última noche del Sónar.
En la jornada del viernes, los organizadores contabilizaron 16.932 espectadores en los escenarios del Sónar Noche, por debajo de las 23.334 personas de 2008, récord histórico del festival.
Por su parte, el Sónar Día de ayer sí que superó los registros de 2008, con 13.580 espectadores frente a los 13.068 del año anterior.
En las tres jornadas del Sónar, que se inició el pasado jueves, participarán 283 artistas, de 27 nacionalidades, (de los cuales 220 son músicos y pinchadiscos y 63 son artistas multimedia) en 71 conciertos, 49 sesiones de pinchadiscos y 25 obras expuestas en SónarMática.