Como la amistad con sus compañeras de la mítica serie que, junto a su amor intermitente y pasional, Ryan O'Neill, la han acompañado en su última escena: la lucha contra el cáncer, un tumor anal que le diagnosticaron hace tres años.
Fue su arrojo y su fuerte temperamento los que le ayudaron a aceptar una recaída en la enfermedad que en 2007 ya creía superada. En pleno tratamiento, la actriz protagonizó un documental para narrar su convalecencia en primera persona. Otra vez Farrah, la tejana de raza, se convertía en ejemplo.
El pasado lunes ingresó en un hospital de Los Ángeles y este jueves, a los 62 años, la Jill atleta, el ángel más vital, dió por perdida la partida.
Sus mayores éxitos, en televisión
Farrah Fawcett forjó su fama gracias a su papel de Jill, el ángel atlético protagonista de 'Los Ángeles de Charlie'. La serie arrasó en los 70, convirtiéndose en un auténtico fenómeno social, y Farrah alcanzó la categoría de símbolo sexual de la época.
Pero su carrera sólo comenzó ahí: Consiguió tres candidaturas a los premios Emmy por la serie dramática 'The Guardian' (2001), por la mini-serie 'Small Sacrifices' (1989) y por la película para televisión 'The Burning Bed' (1984).
También consiguió seis nominaciones a los Globos de Oro, por las dos últimas y por las películas para televisión 'Poor Little Rich Girl: The Barbara Hutton Story' (1987), 'Nazi Hunter: The Beate Klarsfeld Story' (1986), el filme 'Extremities' (1986) y la serie de televisión 'Los ángeles de Charlie' (1976).
El gran amor de su vida
Después de un primer matrimonio con Lee Majors, Fawcett encontraría el amor de su vida en Ryan O'Neal ('Love Story'), con el que tuvo un hijo, Redmond, en 1985. Con él pasó las últimas horas de su vida.
JNP