Cerca de 40 artistas, algunos de renombre internacional y otros jóvenes no tan conocidos exponen sus obras en la muestra 'Pulso XXI' de la Colección Sánchez-Ubiría, que se inaugura este viernes 1 y permanecerá abierta hasta el 25 de septiembre en el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Santander y Cantabria (MAS).
La muestra, que abrirá sus puertas a las ocho de la tarde, ha sido presentada en rueda de prensa por el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Santander, César Torrellas; por el director del MAS, Salvador Carretero; y por la galerista Margarita Sánchez, propietaria de la colección junto con Sebastián Ubiría.
En el acto han estado presentes también el nuevo consejero de Educación, Cultura y deporte, Miguel Ángel Serna, y el director general de Cultura, Joaquín Solanas.
Torrellas ha agradecido a los propietarios de esta "magnífica colección" que hayan cedido parte de la misma para que se muestre en el MAS, que acoge medio centenar de piezas de artistas de "rabiosa actualidad", ha recalcado.
Entre las obras hay óleos, fotografías, instalaciones, esculturas, vídeos y otras basadas en las nuevas tecnologías, firmadas por Alexander Apóstol, Flavia da Rin, Carlos Garaicoa, Graciela Hasper, Juan Salido, Peter Rogiers, Caetano de Almeida o Ángela de la Cruz.
También hay obras de José Damasceno, Iván Navarro, Rui Toscano, Abigail Lazkoz, Fernando Renes, Merlin Carpenter, Enmauel Seitz, Jason Martin o Teresita Fernández, hasta conformar un elenco de 37 artistas.
Para Salvador Carretero, se trata de una exposición "muy atractiva" sobre el arte contemporáneo actual, que permite ver en un espacio público obras de propiedad privada.
En este sentido, Margarita Sánchez, de la sala Distrito 4, ha señalado que "siempre es frustante" tener guardada obra sin poderla darla a conocer, ya que comprar y poseer piezas de arte es importante, pero produce mucha "satisfacción" que otros las vean, sobre todo en un museo.
También han reconocido que la selección de obras hecha por el Museo para esta exposición les ha sorprendido gratamente, tanto a ella como a Sebastián Ubiría, por la "valentía" que demuestra el no haber ido por el "camino fácil", eligiendo piezas de artistas más conocidos y consolidados.
Sin embargo, ha alabado que se haya hecho una selección de artistas nacidos a partir de los años sesenta que trabajan y, de algún modo, están contribuyendo a conformar el arte del siglo XXI, algunos de renombre internacional, pero la mayoría jóvenes no tan conocidos, lo que a su juicio es un gran "acierto".
Ha asegurado que esta colección, en la que conviven los nombres más conocidos con otros que presentan un potencial "muy importante", está hecha con "mucho cariño", el de dos coleccionistas que, sobre todo, "ponen todo el amor del mundo" en este cometido.