La Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) ha registrado en el Congreso de los Diputados una proposición no de ley que urge al Gobierno a proteger los faros y se les reconozca como bien de interés patrimonial y cultural, además de reclamar una ley específica que incluya medidas de protección y promoción, impida una posible privatización de estas infraestructuras y contemple cesiones temporales para fines públicos.
La iniciativa, que será debatida en el Pleno y en la Comisión de Cultura, ha sido impulsada por el diputado asturiano Gaspar Llamazares, quien lamenta que muchos de los 233 faros existentes en España se están "degradando" tras ir quedando vacíos, al mismo tiempo que avisa de que la profesión de farero son "una especie profesional condenada a desaparecer".
Así, defiende que deberían tomarse medidas para la conservación de los faros por tratarse de "un símbolo de esperanza" y parte del "patrimonio, la cultura y la identidad" del país.
En 2010 recuerda cómo el Congreso aprobó una reforma de la Ley de Puertos que abrió la posibilidad de dedicar parte de las instalaciones del faro a otros usos, bajo la autoridad de Puertos del Estado como propietario, en colaboración con las comunidades autónomas y ayuntamientos correspondientes y con la tutela del entorno por la dirección de Costas, de Medio Ambiente, que ha de velar por el dominio público del litoral, evitando que se desnaturalice o se privatice.
Llamazares señala también que países como Francia o Canadá tienen leyes específicas para proteger los faros patrimoniales. "La cultura de los faros está aquí por nacer, pero en países como Francia, Canadá o Estados Unidos tiene una gran implantación. En Canadá y en Francia, por ejemplo rigen Leyes específicas de protección de los farios patrimoniales. Hoy en Francia, cerca de la mitad de los 220 faros existentes están protegidos como monumentos históricos de las Costas de Francia, gracias al impulso de la Sociedad nacional del patrimonio de faros y balizas (SNPPB)", añade.
Al mismo tiempo, especifica que Noruega, en 2008, se convirtió en el primer país del mundo que se dotó de un plan nacional de protección de sus faros, clasificando un centenar como monumentos históricos y creando cuatro museos.
El diputado asturiano de IU denuncia que en Galicia hay un caso "sangrante" con el faro de Estaca de Bares, construido en 1850 y el primero del Cantábrico y uno de los más importantes del Plan General de Alumbrado Marítimo de España (1847), que propició la creación del sistema estatal. "Su entorno podría tratarse como un conjunto histórico patrimonial", advierte.
CONOCER LOS FAROS
A juicio de Llamazares para "salvar este patrimonio es necesario conocerlo", comenzando por la "puesta en valor de archivos, la recolección de objetos y la memoria de los hombres", como se ha hecho en algunos lugares gracias a la iniciativa europea 'Atlantic Lighthouses', que ha permitido convertir el Faro del Pescador (Santoña, Cantabria) en una sala de exposiciones.
Por eso, IU-ICV-CHA reclama al Gobierno que presente a las Cortes un proyecto de ley "específico" de Conservación, protección y promoción de los faros patrimoniales, que incluya medidas acordadas con comunidades autónomas y ayuntamientos en materias como la selección y el reconocimiento de determinados faros como Bienes de Interés Cultural, Bienes de Interés Patrimonial o bienes amparados por otras figuras de protección; la prohibición de su privatización, su rehabilitación y mantenimiento "en una medida razonable" y su posible cesión temporal con fines públicos.
Junto a estas propuestas, también sugiere la posibilidad de concertar convenios con otras administraciones para conservar los faros patrimoniales y promocionar zonas museísticas, centros de interpretación, turismo farero y marítimo litoral, con el fin de "acercar este valioso y desconocido patrimonio a la sociedad, facilitando el acceso del público a sus instalaciones".
FAROS EN ESPACIOS NATURALES
Hace algo más de un mes, la Izquierda Plural registró otra proposición no de ley en la Cámara Baja criticando la iniciativa 'Faros de España', del Ministerio de Fomento, porque en su opinión impedirá que muchos faros puedan ser disfrutados por el público en general, puesto que la intención es que "la mayoría pasen a tener fines lucrativos como hoteles, casas de lujo o restaurantes, dando concesiones y privatizando la gestión de estos espacios que sólo se podrán permitir los más onerosos y pudientes bolsillos".
Por eso, la coalición proponía que las infraestructuras que estén dentro o cerca de espacios protegidos sólo puedan destinarse a uso público como "espacio visitable y expositivo vinculado a la difusión y conocimiento de los valores ambientales, culturales, históricos y paisajísticos de la zona", y que se promuevan convenios con las administraciones públicas, preferentemente las locales afectadas por este plan.