A pocas semanas de dar a luz, la novia de Kiko Rivera ya ha desarrollado el característico instinto protector de madre, aunque confiesa que los antojos no han sido muchos. Así lo ha desvelado en declaraciones a la revista '¡Hola!'.
La guapa modelo asegura que su primer hijo ha sido un bebé muy buscado. Aunque su primer embarazo fue toda una sorpresa y tuvo que mentalizarse, el aborto que sufrió le hizo desear aún más ser madre, por lo que lo volvió a intentar.
Según Jessica, Kiko "está muy ilusionado" con la idea de ser padre, ya que le encantan los niños, y admite segura que su pareja será "un gran padre", tal y como recoge la citada revista.
El apoyo del hijo de Isabel Pantoja ha sido fundamental en todo momento, a pesar de la crisis que sufrió la pareja en el primer trimestre del embarazo. "Tanto Kiko como yo vivimos momentos complicados", ha reconocido, pero una vez asimilada la buena nueva todo fue a mejor.
Sobre una posible boda, Jessica dice tener el tema "aparcado" ya que su prioridad es su bebé. Considera que un papel no va a aumentar el amor que hay entre ellos, aunque no descarta pasar por el altar en un futuro.
La familia también está siendo un gran apoyo para la joven. Tanto sus padres como sus hermanos, al igual que la madre de su novio, están ayudando a la primeriza mamá en todo lo posible y le ofrecen consejo en cuanto se lo pide.
Jessica retomará su trabajo como modelo, ya que quiere que su bebé se sienta orgulloso de ella "como yo lo estoy de mi madre". A pesar de los kilos que ha cogido durante el embarazo, va a seguir luchando por conseguir sus sueños en el mundo de la moda.
La ilusionada futura mamá se muestra feliz ante su situación actual y quiere disfrutar cuanto antes de su bebé, ya que se siente preparada para ser madre. Hoy por hoy, Jessica no le pide nada más a la vida.