No todo son rosas para Kim Kardashian. Al enseñar sus manchas rojas a un dermatólogo durante el último programa de su reality show 'Keeping Up with the Kardashians', Kim se ha enterado de que tiene psoriasis, una enfermedad de piel incurable.

A pocas semanas de su boda, la despampanante socialité está en shock después de descubrir que tendrá que convivir para siempre con las lesiones escamosas e inflamaciones en la piel propias de la psoriasis.

Aunque sea una enfermedad que se puede controlar y minimizar sus efectos, Kim teme por su carrera de modelo. "La gente no entiende la presión que hay sobre mí para lucir perfecta. Cuando gano un poco de peso, inmediatamente aparece en todos los titulares, no me imagino lo que dirán de mí al ver todos estos puntos en mi piel", comentó Kim durante el programa.

La psoriasis es una enfermedad generalmente de tipo hereditario que afecta el tejido de la piel y no tiene cura. Se manifiesta con pequeñas o grandes heridas en la piel de alguna parte del cuerpo, y por lo general ataca a las personas mayores.

Kim reconoció que su madre también fue diagnosticada con psoriasis cuando tenía 30 años, y de ella heredó los genes. Aunque la enfermedad no es contagiosa se necesita de un tratamiento permanente y se recomienda llevar un estilo de vida más tranquilo.