"En absoluto", responde este profesor del Grado de Historia del Arte de la Universidad CEU San Pablo, al ser preguntado por si los bienes de Sijena podrían sufrir algún daño en su traslado a Aragón. "Hoy en día toda la tecnología en torno al traslado de obras de arte está muy estudiada y en España tenemos empresas especializadas", ha precisado en declaraciones a Europa Press.
En concreto, González-Pola ha explicado que lo primero es tomar las medidas a cada pieza para que los carpinteros puedan realizar cajas especiales. Además, estos embalajes deben cumplir con unos requisitos antihumedad, con la normativa antivuelco y deben estar fabricados con materiales neutros, ignífugos, para que en caso de accidente no se quemen, y que amortigüen los golpes. También el camión de transporte debe cumplir con unas constantes de humedad y temperatura.
Además, ha indicado que en el traslado de obras de arte hay "mucha seguridad" y que cuando se trata de piezas "muy extraordinarias" como puede ser una obra de Goya o de Rafael, se contrata a un escolta para impedir que la pieza sea robada. En casos muy puntuales incluso, alguna obra ha sido vigilada en su recorrido por un helicóptero.
En el traslado de obras de arte aparece asimismo la figura del 'correo', una persona que acompaña la pieza en todo momento desde el punto de origen hasta el destino. También podría contratarse un seguro, tal y como se hace en el caso de las exposiciones.
En el caso de Sijena, González-Pola desconoce si el traslado de estas obras, que ha definido como "excelentes y magníficas", requerirá de un escolta desde el punto de vista técnico o al tratarse de una cuestión política, pero en cualquier caso, se ha mostrado convencido de que el traslado se realizará con "todas las garantías" porque es algo que se realiza con mucha frecuencia en todo el mundo. "Es muy raro que se haya perdido, deteriorado o robado una pieza en un traslado", ha subrayado.
En cuanto al tiempo que podría llevar la preparación y traslado de las piezas, el experto ha precisado que depende de la "celeridad" de la empresa constructora de las cajas pues cada cuadro, arca mortuoria o altorrelieve necesita un embalaje a medida. En todo caso, ha indicado que "si hay prisa", sí se podría hacer "rápidamente", al igual que ocurre con los traslados para exposiciones.
Sobre el conflicto que se ha generado en torno a estos bienes que se hayan en depósito en el Museo de Lérida y reclamados por Aragón, González-Pola ha puntualizado que lo que interesa desde el punto de vista del arte y el patrimonio es "que las piezas estén bien conservadas allá donde estén" y ha añadido que no le cabe "la menor duda" de que va a ser así porque "son bienes del patrimonio histórico" y "el nivel en España de conservación de patrimonio ahora mismo es alto".
Por otro lado, ha precisado que, según la "nueva museología", sería bueno que las obras se conserven en el lugar donde se han visto o donde se han hallado --en el caso de una excavación, por ejemplo--, porque "permite contextualizar" la pieza. Si bien, ha precisado que estos son criterios museológicos variables y que lo importante es que se conserven bien y tengan una buena presentación al público.