Sara Montiel despedida solo por sus hijos Thais y Zeus y Giancarlo Viola

EUROPA PRESS 09/04/2013 15:37

Ayer se reunían el ayuntamiento de Campo de Criptana para hablar de la muerte a Sara, en Madrid se hará un homenaje el 11 de mayo y se ha propuesto ponerle una calle que lleve su nombre, recordando lo que fue Sara. Pero quizá sus últimos años en los que se aferraba a seguir siendo la diva y el bellezón que cautivaba a cualquier hombre, parece que le ha pasado factura.

Su mira era siempre ser esa gran diva, y los problemas verdaderos, lavarlos en casa. Tenía que estar siempre perfecta y representar que todo era perfecto de cara a la galería. En su vida no podía haber problemas. Vivía entre la realidad y esas mentiras piadosas que intentaba hacer creer por no verse fuera del lugar que siempre tuvo. Mentirijillas que la prensa, siempre supo entender, no solo este derecho ha estado reservado a Ana Obregón. Atrevida y aguerrida, era capaz de defender ese cuento hasta el final como el supuesto amor de turno y defender que no estaba arruinada, este último capítulo todavía está por escribir.

Ayer fue despedida por muchas caras conocidas pero hoy en el entierro solo han acudido sus hijos, uno de sus amores el italiano Giancarlo Viola. Boris Izaguirre, Enrique Cerezo y el actor Pepe Ruiz.

Giancarlo Viola, ha viajado desde Italia para darle el último beso y entregarle la última rosa, a la que durante muchos años fue su amada. Un amor de ficción o realidad con idas y venidas, muy propio del cortejo de sus épocas de antaño. Ahora sí, ahora no. Ahora yo quiero, ahora no... Así vivieron los últimos años de su vida, con un cariño increible de por medio, no obstante.

El italiano se ha derrumbado en el entierro y ha acaparado todos los flashes, por encima de sus hijos. Como siempre han estado en un plano discreto, como siempre han querido, son los hijos de una de las artistas que más juego ha dado a la prensa y ellos evitaban a toda costa formar parte del mundo del artisteo de su madre, en un principio. Ya que Zeus ha intentado entrar en el mundo de la música y muy apoyado por su madre.

Ahora todavía queda mucho por delante, una herencia, unos problemas con el administrador donde nunca quedó del todo claro si él fue quedándose el dinero de la actriz o si Sara se lo gastaba como el administrador aseguraba, un contencioso que todavía está en los juzgados.