"Es evidente que cada jornada que pasa es más imprescindible tener una victoria, sobre todo en casa. Mañana es un partido en el que el equipo tiene conciencia de que es muy difícil conseguir el pase si se pierde. Es un partido marcado en rojo en el calendario para ganar", afirmó Perasovic ante los medios.
En este sentido, recalcó que "la ansiedad no es buena". "Siempre puedes tener un mal día contra un equipo que está en plena racha y a ver como manejamos esta situación", advirtió el exjugador.
Sobre el Laboral Kutxa Baskonia, reconoció que juega "muy directo" y destacó que es un equipo que ataca "muy rápido, con posesiones muy cortas y con calidad". "Su progreso ha sido muy visible. Juego muy directo, hacen muchos tiros de tres, con mucha velocidad en el juego, todos los jugadores participan con esos tiros rápidos y tienen un potencial físico importante", argumentó.
Perasovic remarcó la idea de que los baskonistas no son el mismo que empezó la temporada. "Han cambiado tantos jugadores que hay cuatro ó cinco jugadores diferentes de los que jugaron la Supercopa Endesa, es totalmente otro equipo. Ellos han conseguido una plantilla digna de respeto y cada jornada juegan mejor", subrayó.
Para este duelo recupera a varios de los jugadores tocados aunque contará con la ausencia de Serhiy Lishchuk. "Ahora mismo es difícil que llegue para mañana. Hoy ya se han incorporado Van Rossom y Loncar que estaban fuera al estar enfermos con un virus. Los dos cuatros que estuvieron fuera contra el Real Madrid, Luke Harangody y Pablo Aguilar, entrenaron ayer y están en condiciones para jugar mañana", celebró.