"Será un Europeo muy difícil. Francia es el actual subcampeón olímpico, y además es anfitrión, también está Rusia y a partir de ahí Chequia y Turquía, semifinalistas en el último Europeo. Luego hay un grupo de muy buenas selecciones como Montenegro, Croacia, Lituania, Letonia, Suecia y por supuesto España. Habrá que ir partido a partido, y con la mentalidad de que sean los rivales los que se preocupen de nosotras. Los encuentros se ganan en la pista, no por el 'roster'", aseguró el seleccionador.
Mondelo reconoce que es un "reto" el volver al estar al máximo nivel y sobre todo porque en la cita gala está en juego las plaza mundialistas. "Es un reto poder competir una vez más al máximo nivel e intentar estar lo más arriba posible, ya que está en juego también la clasificación para el próximo Mundial", añadió el técnico en declaraciones a la FEB, que recoge Europa Press.
El seleccionador, además, aprovechó para destacar la aportación de jugadores veteranas como Amaya Valdemoro, Elisa Aguilar y Laia Palau. "Ellas han sido y son unas ganadoras, y el sentimiento que tienen ahora mismo y transmiten es el de competir siempre al máximo, sin miedo y sin importar el rival. Ese es un sentimiento que se contagia y es una buena plataforma de confianza para las más jóvenes, que tarde o temprano han de coger el relevo", subrayó.
Respecto al gran momento del baloncesto base, tras los dos títulos en los Europeos sub-20 y sub-16, así como la plata en el Mundial sub-17, señaló que "no tiene parangón". "Se consiguen medallas año tras año. Las jóvenes españolas están sobradamente preparadas para competir, y eso da tranquilidad para el futuro, pero además están las menos jóvenes todavía nos tienen que dar tardes de gloria y son el cemento imprescindible para la construcción del equipo nacional", concluyó.