Sólo unos minutos antes de la salida, Vandoorne permanecía en boxes y los mecánicos ni siquiera trabajaban en el coche, un temor que después se confirmaría con el anuncio de la retirada.
De esta manera, McLaren continúa evidenciando serios problemas de fiabilidad que afectan al motor. Tras la rotura del motor del coche del belga durante los libres, en la Q2 de la calificación del sábado el monoplaza del español Fernando Alonso también se rompía, lo que le obligaba a cambiar cuatro componentes para la carrera: motor, turbocompresor y los dos motores eléctricos del MGU-H y MGU-K.