Este es el primer caso de arreglo de partidos en el fútbol holandés y la KNVB apuntó que la investigación había descubierto una oferta de Ibrahim Kargbo, por entonces jugador del Willem II, para amañar el resultado del partido de liga contra el FC Utrecht en agosto de 2009, en cooperación con el singaporense Wilson Raj Perumal, una de las principales figuras en esta lacra del fútbol mundial y que ya ha sido condenado a prisión por ello.
El organismo indicó que Kargbo prometió al por entonces capitán Michael Aerts y a un tercer jugador no identificado trabajar junto a él para dejarse perder a cambio de 25.000 euros para cada uno. Pero aunque el Utrecht ganó 1-0, Perumal rechazó pagarles aludiendo que el acuerdo había sido por una victoria por un margen mayor de un único gol.
"El fútbol holandés es uno de los últimos en Europa en perder su inocencia en este asunto. Hemos advertido mucho tiempo que esto podría suceder en la liga holandesa, pero es todavía difícil aceptarlo ahora que se haya confirmado. Espero que esto añada urgencia en Holanda para luchar contra esta plaga", afirmó el director operativo de la KNVB, Gijs de Jong.
El directivo dijo que se había confirmado que los implicados "pactaron el resultado del partido", pero que no tenían "suficiente pruebas legales para determinar" si Aerts lo estuvo y que "no estaba claro" quien era la tercera persona en cuestión.
Además, el partido benéfico entre el Willem II y la selección nacional de Sierra Leona fue específicamente organizado con el objetivo de manipular el resultado en nombre de un sindicato asiático de apuestas. Del mismo modo, los resultados del combinado africano en otras competiciones podría haber sido también amañados por Kargbo, según el comunicado de la KNVB.
Por otro lado, las alegaciones realizadas por un periódico holandés el año pasado de que otros partidos del Willem II no pudieron ser demostrados, con la federación subrayando que enviaría el artículo a la FIFA y la UEFA y a la policía holandesa.
La KNVB también prohibió a Kargbo, de 33 años y ya suspendido en Sierra Leona por presunto amaño de partidos, a participar en cualquier actividad relacionada con el fútbol del país.