Después de crecer como futbolista en las categorías inferiores del Sporting de Gijón, en la Escuela de Mareo, y debutar con 17 años con el primer equipo en la Primera División, el joven asturiano recala en la entidad grana, donde se convierte en el tercer refuerzo invernal de los catalanes.
"Doy las gracias a mis compañeros porque ellos fueron mi apoyo cuando supe que tenía que marcharme", dijo Muñiz esta tarde en su despedida, donde también agradeció a la afición por su cariño. "Muchas gracias por los muchos mensajes de apoyo que estoy recibiendo". Es un proyecto ilusionante y por eso me decidí por esta opción, aunque quiero agradecer también el interés que otros equipos han tenido por mí", indicó.