"Si analizamos el partido en frío, el 3-0 es exagerado. Pero esto es fútbol y estas cosas suceden. Creo que sufrimos de ansiedad frente al arco contrario. Lo bueno es que contamos con las oportunidades, aunque no las concretemos. Tenemos que trabajar en eso y esperamos que la mejoría se note pronto", señaló en la rueda de prensa posterior al duelo ante España.
Aún así, el seleccionador nigeriano confesó que el tanto de Fernando Torres, el segundo en contra de los suyos, desconcentró al equipo africano. "En el primer tiempo estuvimos bien parados, pero cuando nos metieron el segundo gol ya nos desarmamos y perdimos las formas. Nos desconcentramos y eso a este nivel se paga caro", finalizó.