El arquero madrileño aterrizó en Sevilla tras una temporada en la capital maña en la que su protagonismo fue de menos a más. De tener una participación residual sobre el terreno de juego pasó a ser un fijo bajo palos desde el mes de enero, llegando a dejar al equipo a las puertas de los 'playoffs' de ascenso.
Tras una larga trayectoria forjada principalmente en las filas de la AD Alcorcón, el Elche CF y el Real Zaragoza, Manu Herrera selló a sus 34 años su regreso a Primera División.
En el Betis, el guardameta tendrá el difícil reto de convencer a su nuevo entrenador, Gustavo Poyet, para gozar de unos minutos en la portería que en las últimas campañas han estado predominados por su ahora compañero Antonio Adán.