"Vamos a jugar contra un gran rival como es el Atlético de Madrid; será un partido muy difícil como ya lo fue contra el Barcelona, el Real Madrid, el Valencia... Son los equipos más fuertes de la competición. Será un partido muy difícil pero vamos a intentar ganar. Iremos a ser competitivos y ser un rival muy difícil para ellos. Quiero que hagamos nuestro juego; vamos a intentar combinar y crearles ocasiones", declaró en una entrevista a la web del club donostiarra desde la concentración de Marbella (Málaga).
En este sentido, el técnico escocés reconoció que sería "genial" puntuar ante los Simeone, sobre todo después del empate ante el Málaga en La Rosaleda (1-1). "Vamos a intentar conseguir puntos fuera de casa en dos campos tan difíciles. Cuando vi el calendario y vi que jugábamos en tres días dos partidos tan complicados fuera de casa supe de la dificultad de estos días. Nos hemos quedado aquí en Marbella para preparar bien el partido. Ya logramos un buen resultado en el primer choque y vamos a intentar hacer lo mismo en el segundo", señaló.
Con respecto al cuadro rojiblanco, destacó que "todo el mundo sabe lo fuerte que es". "Es un equipo que puede jugar de distintas formas. Son fuertes, competitivos, pero a la vez tienen muy buenos jugadores, muy buenas individualidades; probablemente, algunos de sus jugadores estén infravalorados. Son un equipo fuerte defensivamente y con buenos jugadores arriba, es lo que se espera de un equipo que ya fue campeón el año pasado. Es un gran equipo en una gran Liga, será un partido muy duro", analizó.
Además, rechazó quejarse de las bajas de los centrales Jon Ansotegi e Íñigo Martínez, que se perderán el duelo por sanción. "Todos los equipos tienen bajas. Desafortunadamente, nosotros tenemos dos jugadores importantes sancionados para este partido. Tanto Jon Ansotegi como Íñigo Martínez han jugado muy bien hasta ahora y han sido muy importantes para el equipo, han sido consistentes y muy fiables en la mayoría de los partidos. Tenemos otros jugadores que demostrarán qué son capaces de hacer", aseveró.
Por otra parte, el británico se mostró "bastante satisfecho" con el trabajo de su equipo en La Rosaleda. "Me gustó la actuación del equipo, no tiramos la toalla en ningún momento. El Málaga jugó muy bien la primera parte del partido y tuvimos que mantenernos en él. Estoy un poco decepcionado por el tipo de gol que encajamos, pero trabajamos muy duro para conseguir un buen punto", subrayó.
"Es el partido en el que más competitivos hemos sido fuera de casa, no lo hemos sido durante muchos otros. Es algo que tenemos que conseguir. Debemos ser un rival difícil para el adversario y ser un equipo fuerte. El otro día en Málaga hicimos buenas jugadas y tuvimos buenos ratos de fútbol, así que estamos contentos", prosiguió.
El preparador de Glasgow apeló a "mostrar la mejoría fuera de casa durante más tiempo". "Hemos empatado muchos partidos fuera de casa y ahora tenemos que ver si somos capaces de convertir esos empates en victorias. Aún así, creo que el equipo está mejorando, los jugadores están trabajando muy bien, más fuerte, y creo que estamos haciendo un buen fútbol", incidió.
Por último, deseó poder luchar para acabar la temporada "lo más arriba posible". "Soy nuevo en este trabajo, estoy aprendiendo de la Liga, de los jugadores, que tienen ahora la oportunidad de demostrarme de qué son capaces. Tenemos nueve partidos más de Liga y vamos a intentar ganar todos los que podamos. Queremos seguir apretando y acabar la Liga lo más arriba posible", concluyó.