El Ayuntamiento de Barcelona celebrará los 20 años de la organización de los Juegos de 1992 con una programación marcada por la austeridad y el simbolismo, que no prevé volver a encender el pebetero y se basará en impregnar del espíritu olímpico algunos actos ya presentes en el calendario de la capital catalana.
"Hoy Barcelona no se puede permitir una gran fiesta como la de los diez años en el Estadio Olímpico, la ciudad no lo entendería. No podemos permitirnos grandes celebraciones", ha remarcado en la presentación la cuarta teniente de alcalde y responsable de Deportes, Maite Fandos, y ha añadido que los actos no supondrán un coste específico al consistorio.
Así, ha descartado abrir el Estadio de Montjuïc exclusivamente para celebrar la efeméride olímpica, aunque sí se aprovechará la inauguración del Mundial Júnior de Atletismo del 10 de julio para reconocer a los más de 30.000 voluntarios del 1992, quienes han sido convocados en una apertura en la que se recordarán los Juegos con su banda sonora y coreografías.
Tampoco volverá a quemar la llama del pebetero de la montaña olímpica por el elevado coste que conllevaría revisar la instalación y encenderla: "Si hubiera habido una competición sí, pero para abrirlo cinco minutos y cerrarlo es mejor destinarlo a otras cosas, como el área social".
En su lugar, se utilizará uno de simbólico el día 25 de julio para culminar un recorrido de relevos de la antorcha olímpica, que se planea iniciar en la plaza Sant Jaume y acabar en el Museo Olímpico Joan Antoni Samaranch y que contará con entidades deportivas, personalidades y atletas; además, el diseño de la antorcha saldrá de un concurso entre las escuelas de diseño barcelonesas.
En cuanto a las citas deportivas, no se organizará ninguna de especial y se aprovechará la Cursa de la Mercè del 16 de septiembre para que las camisetas oficiales del evento luzcan el logotipo del aniversario: cinco letras B a modo de anillos olímpicos acompañadas del lema 'Sempre Olímpics'.
Las fiestas de la Mercè dedicarán también a los Juegos su última noche --la del 24 de septiembre--, ya que se abrirá el espectáculo piromusical con las melodías más representativas del evento, y contará con la alocución de Constantino Romero, quien fue el 'speaker' del Estadio Olímpico en la inauguración y cierre de hace 20 años.
MEDALLAS DE ORO AL MÉRITO CÍVICO
En el ámbito institucional, el 4 de julio se hará un acto conmemorativo en el edificio consistorial al que asistirán diversas personalidades vinculadas con los Juegos, y se entregará la Medalla de Oro al Mérito Cívico a Leopoldo Rodés, por su tarea como impulsor de participación de la sociedad civil, y a Josep Miquel Abad, por su trabajo al frente del Comité Organizador.
Además, el Museo Olímpico ha preparado un programa de actividades específico, como una exposición sobre las mascotas olímpicas --Cobi y Petra-- y otra de fotografías de los Juegos, y las subsedes olímpicas de la Seu d'Urgell (Lleida) y Banyoles (Girona) realizarán actos conmemorativos, coincidiendo con la organización de pruebas de piragüismo y remo, respectivamente.
Los Juegos Paralímpicos también tendrán su especial recuerdo con la edición de un cupón conmemorativo de la Once, que se realizará el 23 de septiembre para recordar la fecha de su inauguración, y tendrá una tirada de más de cinco millones.