Asimismo, la vicepresidenta del COE, Theresa Zabell, confesó que la situación en Mersin "es un poco inestable" debido a las protestas que está registrando el país en las últimas semanas y que la comunicación con el Comité Organizador está siendo "complicada".
Tras la Asamblea General Ordinaria del organismo, que se celebró en su sede en Madrid, la doble campeona olímpica no ocultó la preocupación del COE por estas protestas y por el "posible altercado" anunciado para la Ceremonia de Inauguración, el próximo 20 de junio.
"Tenemos todo el interés en que estos Juegos salgan bien porque la próxima edición se disputa en Tarragona. Aunque todos vamos a ir con el alma encogida por todo el trabajo que se ha invertido en los últimos dos años y pico y lo que está pasando ahora en las calles", señaló Zabell.