(Crónica) Chan logra su ansiado oro en un día con protagonismo para Dahleimer y Wust

A Chan, triple campeón del mundo y plata olímpica en los pasados Juegos de Sochi de 2014, le faltaba la presea dorada para cerrar un enorme palmarés y lo logró en la competición por equipos, donde brilló junto a Gabrielle Daleman.

El patinador canadiense, que había fallado un tanto en el Programa Corto, estuvo más sólido en el Largo y firmó 179.75 puntos, su mejor marca de la temporada. Su compañera le siguió con un actuación a buen nivel, aunque sólo le valió para ser tercera con 137.14 puntos, por detrás de la joven rusa de 15 años Alina Zagitova (158.08) y la estadounidense Mirai Nagasu (137.53), la primera de su país en lograr ejecutar un triple Axe en unos Juegos.

Las dos actuaciones individuales estuvieron acompañadas por las de la pareja de danza sobre hielo formada por Tessa Virtue y Scott Moir, que también consiguieron la mejor puntuación (118.10) por delante de los estadounidenses 73 puntos, por delante del equipo neutral formado por deportistas rusos (66) y de Estados Unidos (62).

Por otro lado, otros dos nombres propios destacaron en esta tercera jornada de competición. En el biatlón, la alemana Laura Dahlmeier logró su segundo oro en la cita tras imponerse en la prueba de 10 kilómetros persecución, convirtiéndose en la primera biatleta en lograr el doblete con el sprint en unos Juegos.

La germana, pentacampeona del mundo el año pasado, no se puso nerviosa por la presión de la rusa Anastasiya Kuzmina y decantó la victoria de su lado en la tercera parada de tiro donde no falló ninguno de sus cinco disparos por los dos errores de su rival.

Dahleimer, infalible toda la prueba con el rifle, ya no tuvo problemas y se impuso con un tiempo de 30:35.3, casi medio minuto mejor que Kuzmina, que libró una bonita batalla por la plata con la francesa Anais Bescond, decidido por dos décimas.

Por su parte, en la prueba masculina de 12,5 kilómetros persecución, el oro fue para el francés Martin Fourcade, que reeditó su corona de hace cuatro años en Sochi y conquistó su tercera presea dorada, por delante del sueco Sebastian Samuelsson y el alemán Benedikt Doll.

El otro nombre propio del lunes fue el de la patinadora holandesa Ireen Wust, que se proclamó campeona olímpica en los 1.500 metros del patinaje de velocidad, consiguiendo un nuevo récord con su décima medalla olímpica, la mitad de oro.

La ganadora se impuso con un tiempo de 54.35 segundos, con la japonesa Miho Takagi y la también holandesa Marrit Leenstra quedándose la plata y el bronce, respectivamente.

ORO PARA ANDERSON EN SLOPESTYLE

En cuanto al snowboard, la estadounidense Jamie Anderson también defendió su corona olímpica de Sochi adjudicándose la victoria en la modalidad de 'slopestyle', en una final marcada por el fuerte viento y las caídas.

Así, sólo cinco 'riders' pudieron concluir su primera ronda sin caerse, una de ellas Anderson, que con una puntuación de 83.00 puntos le bastó para asegurarse el oro por delante de la canadiense Laurie Blouin (76.33), actual campeona del mundo y que el viernes había tenido que ser evacuada en camilla por una caída en un entrenamiento, y la finlandesa Enni Rukajarvi (75.38).

Ninguna de las finalistas, todas las inscritas por no haberse podido celebrar la calificación, se libró de caerse. La japonesa Reira Iwabuchi, primera del ranking de la Copa del Mundo, acumuló hasta tres caídas, dos en la primera manga y una en la segunda.

En la modalidad de baches del esquí acrobático, el oro fue para el canadiense Mikael Kingsbury, plata en 2014, por delante del australiano Matt Graham y el japonés Daichi Hara, mientras que la noruega Maren Lundby pudo con la nieve, el frío y el viento para coronarse campeona en el trampolín normal de los saltos de esquí, con la alemana Katharina Althaus y la japonesa Sara Takanashi completando el podio.