España ha sumado en la penúltima jornada un total de siete medallas: tres de oro, dos de plata y dos de bronce. Craviotto y 'Perucho', que ya fue plata en los Juegos de Pekín, volvieron a reencontrarse para ganar un oro muy valioso; en las postrimerías de la jornada, el lanzador Borja Vivas consiguió otro oro con autoridad.
Craviotto y Perucho atesoran una buena colección de medallas y en Mersin no podía ser menos. El primero en colgarse la presea fue Saúl en K1-200 m, donde firmó un bronce trabajadísimo tras una carrera muy igualada en la que se impuso el serbio Dragosavijevic.
Lo cierto es que esta medalla, la primera del día para el equipo español, no le sentó nada mal a Craviotto y debió animar lo suyo a Carlos Pérez, pues la pareja se hizo con el oro en K2 200 con un tiempo de 32.751, por delante de la pareja italiana (+0.283) y el equipo turco (+1.222).
Por su parte, en kárate, Irene Colomar (-68kg.) se plantó en la final exhibiendo un magnífico estado de forma, aunque no pudo superar a la turca Burucu (5-2), algo similar a lo que vivió Sara Sorribes, que se colgó la medalla de plata tras caer ante la karateca local Buyakakcay (5-3).
Además, en tenis de mesa la pareja femenina formada por Sara Ramírez y Yanfei Shen se alzaron con el oro confirmando su condición de grandes favoritas e imponiéndose a la pareja francesa formada por Li y Xian. Mientras, el equipo español formado por Carlos Machado y He Ziwen "Juanito" fueron bronce al ganar Jevtovic y Pete tras una espectacular remontada.
Por último, el malagueño Borja Vivas, demostrando su gran temporada, cerró la jornada con una medalla de oro, la única de este sábado en atletismo, que hace recuperar a España la cuarta posición en el medallero. Su lanzamiento de 19.99 metros en la modalidad de peso, aunque por debajo de sus últimos registros, fue suficiente para alzarse con el triunfo.