Esta reducción en las ganancias se produjo a pesar de que el beneficio bruto de explotación (Ebitda) fue de 334,9 millones de euros en 2016, lo que supone un incremento del 40% con respecto al año anterior.
También coincidió con un fuerte incremento en el volumen de ventas, del 14%, hasta los 3.480 millones de euros. El impacto negativo del tipo de cambio y las correcciones de valor tuvieron, por contra, un efecto negativo sobre las cuentas.
"Como se ha anunciado, durante el año 2016 hemos conseguido un gran aumento del volumen de ventas. Nuestra rentabilidad operativa es correcta, aun cuando tanto el volumen de ventas como los resultados se han visto lastrados por efectos negativos", indicó la directora general de finanzas de la empresa, Emese Weissenbacher.
Los resultados antes de intereses e impuestos (Ebit) se situaron en 115,7 millones de euros en 2016, frente a 135 millones un año antes, debido a unas correcciones de valor por 60 millones de euros.
El presidente del consejo de administración del grupo, Alfred Weber, explicó que la empresa ya se encuentra "desarrollando y fabricando tecnologías que abren nuevas perspectivas en el campo de la salud y la movilidad de las personas".
"En el futuro creceremos cada vez más con aplicaciones de filtración ajenas al sector del automóvil", indicó el directivo, antes de recordar la transformación que están experimentando las industrias de la automoción y de la ingeniería mecánica.