El Banco Asiático de Desarrollo, que por primera vez se reúne estos días en España para su asamblea anual, alerta de que muchos países de la zona no podrán cumplir con los Objetivos del Milenio, si la hiperinflación de los alimentos continúa.
Este organismo multilateral se dedica desde 1966 a intentar reducir la pobreza, concediendo a los países de la región créditos baratos para impulsar el desarrollo social y económico de sus sociedades. Con ese dinero, los países beneficiados pagan a las empresas concesionarias, que pertenecen a los Estados miembros de la institución.
En total, el banco cuenta con 67 países-accionistas. España entró a formar parte en 1986. Desde entonces, ha aportado unos 600 millones de dólares: es el trigésimo donante de la entidad. Pero las empresas españolas -relativamente poco presentes en la región- sólo han conseguido de momento 186 millones en concesiones.
La celebración en Madrid de la 41º Asamblea del Banco Asiático de Desarrollo, que contará con más de 3.000 representantes, busca aumentar la participación española. Su director general, Rajat M. Nag, charló con Informativos Telecinco sobre todos estos temas.