En su informe mensual de coyuntura publicado hoy, el Banco de Francia también señaló que en junio el indicador del clima de negocios en la industria retrocedió un punto para quedarse en 100, que es el nivel que marca la media a largo plazo.
Por su parte, el indicador de los servicios se mantuvo estable en 97 puntos, es decir, por debajo del listón que marca esa media de largo plazo.
Para el primer trimestre de 2009, la entidad emisora había estimado que el Producto Interior Bruto (PIB) había progresado un 0,4%, pero el Instituto Nacional de Estadística (INSEE), a la espera de confirmar la cifra definitiva, ha avanzado que el crecimiento económico entre enero y marzo fue de sólo el 0,1%.
En los últimos tres meses de 2009, el PIB francés aumentó un 0,6% -según los datos ya definitivos-, un dato significativamente mejor que el de los otros grandes países de la zona euro.
El Gobierno francés calcula que la economía crecerá en el conjunto de 2010 un 1,4%, después del bajón del 2,5% sufrido en 2009, el mayor en un año experimentado por la economía del país.
Para 2011, el Ejecutivo espera lograr un incremento del 2,5%, aunque como la inmensa mayoría de los institutos de previsión consideran que es una proyección demasiado optimista, los ministros responsables han admitido que se podría corregir una vez que se tengan las estadísticas de agosto.