Así lo manifestó Botín tras informar de que el Grupo financiero obtuvo un beneficio neto atribuido de 8.876 millones de euros en 2008, un 2,03% menos que un año antes, debido a las provisiones hechas por la entidad para afrontar la crisis y reforzar el balance, que ascendieron a 10.160 millones de euros.
Al ser preguntado por las críticas que ha recibido el sector por el frenazo en la concesión de crédito, Botín dijo que el Santander "está comprometido con este país" y añadió que "nos interesa muchísimo prestar, es nuestro oficio", al tiempo que señaló que la gran mayoría de la banca continúa apostando por el crédito.
Según afirmó, los bancos y las cajas de ahorro trabajan "en la misma línea" para reactivar la economía y continuar prestando dinero, si bien es necesario explicar a la ciudadanía la situación.
En su opinión, el hecho de que se concedan menos créditos se debe a que "la demanda ha caído" y aseguró que, en el actual escenario, es el momento de "trabajar todos juntos" -Gobierno, empresas, sindicatos y el sistema financiero- para sacar adelante el país.
Sobre la crisis financiera y económica internacional, aseguró que la actividad económica "todavía atraviesa sus peores momentos" y dudó que la recuperación llegue antes de finales de 2009.
En cuanto a las medidas de apoyo al sistema financiero del Gobierno, explicó que el Santander no necesita acudir a ellas, pese a que son "muy acertadas" y explicó que "no van a costar un euro" a los contribuyentes ya que "no son ayudas, ni subvenciones", sino "mecanismos de financiación a precios de mercado".
Se congratuló de que España tenga bancos "sólidos y fuertes" y calificó de "preocupantes" las recapitalizaciones bancarias que realizan algunos gobiernos, ya que "distorsionan la libre competencia" al inyectar capital "en condiciones fuera de mercado".
Consideró que previsiblemente en España no se realizarán recapitalizaciones, al tiempo que reiteró que "seguro que el Gobierno tomará las medidas adecuadas".
Botín, propuso que se mejoren las condiciones de las línea de crédito del ICO para ajustarlas al mercado y aseguró que si se incluyen estos cambios, el Santander "se comprometería a adjudicar 6.000 millones de euros, un 20% del total disponible".
Botín consideró que para España "es muy importante tener bancos sólidos y fuertes", al tiempo que precisó que "e los resultados presentados hoy "el 31 por ciento se ha obtenido en España" y el resto en el extranjero.
"Además estamos dando 5.000 millones de euros en dividendos a tres millones de accionistas" y estamos "muy comprometidos con nuestros equipos", explicó Botín, que añadió que la primera entidad financiera española da empleo actualmente a "más de 160.000 personas y vamos a seguir haciéndolo".
Según adelantó la entidad no tiene previsto realizar más compras esta año, ni tampoco realizar ninguna ampliación de capital, y destacó que asumirá "el papel que le corresponde" en el sistema financiero y contribuirá a la reactivación de la economía "sin ayudas del Gobierno" por su buena posición de capital y liquidez.
Argumentó que la "obligada prudencia" ante el entorno económico actual es la causa de que el Santander no haya podido presentar un beneficio anual de 10.000 millones de euros.
Además, destacó que las compensaciones a clientes que el Grupo Santander asumirá tras el fraude de Madoff y la quiebra de Lehman Brothers supondrá un coste conjunto de 450 millones de euros netos.
Según destacó, el caso Madoff, una "estafa colosal", le ha producido "sorpresa", ya que, en su opinión, "es incomprensible que una entidad sometida a una supervisión tan minuciosa como la que se realiza en EEUU haya podido cometer un fraude durante tanto tiempo y por un importe tan elevado".
Solbes ha apoyado como un "concepto elemental" que los bancos sólo presten a quienes pueden cumplir lo pactado y subrayó que "otra cosa" son las actuaciones del Gobierno para ampliar el "ámbito de solvencia" de empresas y familias en un contexto de congelación crediticia como el actual.