Las medidas más destacadas de este plan de acción deberán ponerse en marcha antes del 31 de marzo de 2009, según se recoge en las conclusiones de la cumbre. Pero antes, los jefes de Estado y de Gobierno del G-20 se reunirán de nuevo. Será antes del 30 de abril de ese año y con el fin de verificar que los compromisos se han cumplido, ya con la presencia del nuevo presidente estadounidense, Barack Obama.
Por otro lado, todos han reiterado que hay que rechazar el proteccionismo y que no se deben erigir nuevas barreras al comercio y a la inversión. El presidente de EEUU, George W. Bush, volvió a hacer hincapié en que el crecimiento económico es el mejor camino para solucionar los problemas y afirmó que "el camino más seguro es a través del capitalismo de libre mercado". En este sentido, el presidente de EEUU, ha subrayado que el mundo debe "recharzar" el proteccionismo e instó a avanzar en la ronda de Doha, lanzada en 2001 y que en la actualidad se encuentra bloqueada, a finales de diciembre.
Asimismo, Bush señaló que el G-20 está comprometido con políticas "pro-crecimiento" y señaló que los líderes habían acordado los principios sobre cómo reformar el sistema financiero.
También suscriben el principio defendido por Francia de que ningún mercado, producto ni actor financiero pueda escapar a la regulación o al menos a la supervisión. No obstante, los líderes insisten en que hay que evitar una regulación excesiva que ponga en riesgo el crecimiento y restrinja los flujos financieros.
Además, se fortalecerá el papel del Fondo Monetario Internacional (FMI), al que algunos países ya han propuesto aumentar sus contribuciones. Así, tras la cumbre, el Fondo adoptará un papel más activo de advertencia y vigilancia, emitiendo comunicados periódicos sobre los riesgos de los mercados financieros, de manera conjunta con el llamado Foro de Estabilidad Financiera, que incluye al G7, además de a Australia, Singapur, Suiza y Holanda. Los líderes del G-20 se han comprometido de esta manera a reformar el FMI y el Banco Mundial (BM) para dar mayor voz a los países emergentes.
Otro de los acuerdos alcanzados es el de aumentar la supervisión de los bancos trasnacionales, ante la constancia de que los Acuerdos de Basilea, que establecieron las normas reguladoras en 1988 y que se revisaron en 2004, no han funcionado. Así, a propuesta del Reino Unido, se creará una red de supervisores que se encargaría de vigilar a los mayores bancos del mundo, operen donde operen.
La intervención de Zapatero
Por su parte, Zapatero ha propuesto políticas fiscales coordinadas globalmente para reactivar la economía, reclamó una nueva regulación de los sistemas financieros, con mayor control y transparencia, y abogó también por una "nueva cultura corporativa" en las empresas para evitar "salarios astronómicos" y beneficios injustificados. El jefe del Ejecutivo español ha recordado la responsabilidad de los Gobiernos a la hora de reactivar la economía y de poner orden en los mercados, pero "sin sustituirlos"; es necesario intervenir, pero nunca coartar la libertad económica, subrayó.
La primera intervención de Zapatero en la cumbre duró poco más de diez minutos y estuvo centrada en la crisis de la "economía real" y en la necesaria regulación de los mercados, pero el presidente del Gobierno español instó a los líderes del G-20 a no olvidar su compromiso "con otra crisis mayor, más grave e intolerable que es la de la desigualdad y la pobreza" en el mundo. "No podemos escatimar ninguna energía en la lucha por cumplir con los objetivos del milenio", manifestó.
Brasil, que ejerce la presidencia del G-20, ha respaldado la participación de España en la próxima cumbre prevista para antes de finales de abril, y mencionó la posibilidad de su integración formal en este Grupo. El canciller brasileño, Celso Amorim, ha recordado que Lula mencionó que sería importante incluir a otro país en desarrollo. "Puede ser que desde ahora hasta la reunión en Reino Unido, el G20 se convierta en un G22", añadió el canciller en alusión a la posible entrada de España.
Mayor supervisión y reforma de las instituciones MV