Según los datos del Banco de España, en la subasta celebrada hoy, el interés marginal se rebajó en 0,26 puntos en el caso de las letras a tres meses y en 0,48 puntos en las de seis.
Esto se debe a que el interés de las letras a tres meses se situó en el 0,69% frente al 0,95% de la anterior operación, en tanto que el interés de las letras a seis meses también se ha reducido hasta el 1,17% desde el 1,65% de subasta precedente.
Además, el Tesoro español no tuvo problemas para colocar la emisión, ya que aunque el objetivo de captación de la puja de hoy se situaba entre los 2.500 y 3.500 millones de euros, la demanda ha sido de 10.928,89 millones.
Esto significa que la demanda ha triplicado el montante que finalmente ha sido adjudicado.
Así, del total de los 3.400 millones de euros colocados por parte del Tesoro, 971.409 euros correspondieron a las letras de tres meses y los 2.457.872 millones restantes a las letras de seis meses.
Esta era la primera emisión del Tesoro después de que el pasado viernes, el Comité de Supervisores Bancarios Europeos (CEBS) publicara los resultados de las pruebas de solvencia de la banca europea.
La transparencia que ha supuesto estas pruebas para el sistema financiero español y como consecuencia, la confianza que han vuelto a depositar en España los mercados, ha contribuido a que en los últimos días se haya reducido el diferencial entre el bono español y el alemán hasta niveles de mayo.
Esta reducción supone una menor percepción del riesgo que comporta invertir en bonos españoles.
Y es que en la última subasta de estas características celebrada el pasado 22 de junio, aunque el Tesoro Público adjudicó un importe mayor, 4.020 millones de euros, en ese caso tuvo que elevar levemente el interés marginal de las letras a tres meses desde el 0,70% al 0,95%, y del 1,32% al 1,65%, en las de seis meses.
Al respecto de la subasta de hoy, el economista jefe de Intermoney Valores, José Carlos Diéz, indicó que el hecho de que el Tesoro haya logrado colocar 3.429 millones en letras a tres y seis meses, con un interés menor que en la anterior subasta de este tipo, es una "excelente noticia".
Además, consideró que la buena acogida que está teniendo en los mercados las emisiones del Tesoro de deben en parte al "buen diagnóstico" que hizo el Gobierno de la crisis y a las medidas que puso en marcha durante los meses de mayo y junio.
Aunque indicó que la "puntilla" la han puesto los resultados de los test de solvencia de la banca europea que se publicaron el pasado viernes, que han ayudado a reducir el diferencial entre el bono español y el alemán.
El Tesoro también logró colocar 5.968,97 millones en letras a doce y dieciocho meses, a pesar de que ofreció una rentabilidad menor, del 2,249% y 2,4%, respectivamente, que en la anterior operación de estas características.
En ese caso, la demanda alcanzó los 12.494,01 millones de euros, con lo que duplicó la cantidad adjudicada.
En el mes de julio, el Tesoro ha logrado colocar entre bonos, obligaciones y letras casi 26.000 millones de euros.