Areva aclara tras varias informaciones aparecidas en los medios de comunicación que sus resultados no serán aprobados por el consejo de administración hasta el próximo 3 de marzo y que esta cifra corresponde a la primera estimación analizada el pasado 18 de febrero por el Comité de Ética y Auditoria, que seguirá trabajando hasta el 2 de marzo con las cuentas.
La compañía achaca estas pérdidas a varios factores, como los impagos relacionados con algunos activos actuales y anteriores, incluidos los activos fiscales diferidos (DTA por sus siglas en inglés) del proyecto de la planta Comurhex II.
Asimismo, también han tenido un impacto negativo las provisiones por los riesgos y la conclusión de proyectos de construcción o modernización de reactores, incluido el proyecto Olkiluoto 3 EPR, o por los contratos de energías renovables.
En esta línea, las perdidas reflejan las provisiones vinculadas a los cambios en la aplicación de la regulación relativa a las obligaciones de fin de ciclo.
En este contexto, Areva recuerda que está trabajando en el desarrollo de una plan de competitividad y una hoja de ruta estratégica y financiera que se presentará con los resultados anuales el 4 de marzo.