Este importe se obtendrá con la constitución de una sociedad mixta que gestionará los 26 aparcamientos públicos del centro de la ciudad (actualmente quince son gestionados directamente por la empresa pública B:SM y otros once por empresas privadas).
Según explicó en rueda de prensa el alcalde de la ciudad, Xavier Trias, el 50% de los pisos se destinarán a alquiler social para ancianos y personas en situación de emergencia, como desahuciados o víctimas de violencia machista. Estos colectivos pagarán en función de sus ingresos, por debajo del precio de mercado y nunca un 30% más que sus ingresos familiares. La otra mitad de las viviendas será para familias y jóvenes, con precios que oscilarán entre los 200 y los 400 euros mensuales.
La nueva empresa mixta de gestión de los aparcamientos públicos tendrá una concesión por 25 años, B:SM tendrá un 40% de su capital y las empresas privadas el 60% restante, que se adjudicará mediante concurso.
El Ayuntamiento de Barcelona prevé que los primeros 500 pisos que se construirán a partir de los ingresos derivados de esta externalización estarán construidos a finales de 2014.