En un comunicado, la empresa ha explicado que el cierre de ambas fábricas, que cuentan con 60 y 55 empleados, respectivamente, "será inevitable porque se ha sobrepasado la capacidad de desarrollo en Asia Pacífico en los últimos años".
"Esta sobrecapacidad de producción ha dejado márgenes extremadamente bajos que han convertido nuestras operaciones en Malasia e India en no rentables", ha explicado Girgio Greening, directivo del grupo.
Basf ha asegurado que va a trabajar para que los empleados que se vean perjudicados por estos cierres encuentren "un adecuado plan de transición".
Por otra parte, la firma química está preparando nuevas operaciones en Sudamérica para introducir el negocio de Styropor en zonas de Argentina y Brasil. Actualmente, esta línea de negocio tiene en esta región unos 80 empleados y una capacidad de producción de 83.500 toneladas.