Sólo en agosto, el beneficio combinado de estos gigantes aumentó un 6,8 por ciento con respecto al mes anterior, según el comunicado del ministerio.
Los ingresos por negocio de estas firmas totalizaron en los ocho meses 2,88 billones de dólares, lo que supone un incremento del 37,6 por ciento interanual.
Sectores como el de energía, petroquímica, petróleo, metales no ferrosos y carbón registraron mayores beneficios en agosto que en julio, mientras que los de maquinaria, hierro y acero, comercio, construcción e inmobiliaria y automoción registraron beneficios menores a lo previsto.
El único que sufrió pérdidas fue el del tabaco, aunque el ministerio no especificó los porcentajes.
Las empresas estatales chinas son aquellas directamente controladas por el gobierno central y las supervisadas por los locales, pero excluyen a las financieras en manos del gobierno.