Así lo ha indicado en declaraciones a los medios antes de intervenir en una la jornada de presentación del estudio 'El reparto y la capitalización en las pensiones españolas', del IESE y la Fundación Edad y Vida, en las que no ha escondido que la sentencia del Tribunal Constitucional de abril que consideró nula la normativa hasta entonces vigente y que ha motivado esta nueva regulación tiene "un coste".
Sin embargo, Burgos ha señalado que no se podrá valorar el incremento del gasto que esta nueva regulación supondrá para el sistema de pensiones hasta que ésta no esté definitivamente definida.
Preguntado por si el informe remitido ha tenido ya una buena acogida por parte de patronal y sindicatos, Burgos se ha mostrado convencido de que "los agentes sociales son conocedores de los efectos que puede tener una regulación mal enfocada y desequilibrada y de que es oportuno también dar entrada a más personas al sistema de pensiones".
A partir de ahí, ha dicho que se puede discutir "sobre cuestiones de matiz", a lo que ha añadido que dicha discusión debe dar una "solución rápida" para aclarar la situación de millones de cotizantes a tiempo parcial.
Por su parte, Burgos ha asegurado que la propuesta del Gobierno, que ha tildado de "equilibrada y ponderada", garantiza "el acceso a un porcentaje mucho mayor de trabajadores a la pensión", pero con una "cuantía proporcionada al esfuerzo contributivo", lo que "es compatible con la sostenibilidad del sistema".
Dicho esto, Burgos ha confiado en poder suscitar el máximo nivel de consenso posible en torno a esta propuesta, en la que, según ha asegurado, se da un "cumplimiento estricto" del Constitucional.
EN CONTRA DE UN SISTEMA DE PENSIONES DE CAPITALIZACIÓN.
Por otro lado, el secretario de Estado de Seguridad Social se ha referido al estudio presentado en la jornada, en el que se apuesta, entre otras cosas, por un sistema de pensiones de orientación sueca, con cuentas nocionales y un tipo de cotización reducido.
Este sistema, señala el informe, debería realizar ajustes automáticos en las pensiones públicas según edad de jubilación y esperanza de vida, tendría una edad de jubilación "flexible" y debería completarse con "planes capitalizados obligatorios o casi obligatorios".
Por su parte, Burgos ha señalado que al margen de "aportaciones teóricas", el Gobierno "no aboga por una sistema de capitalización", sino que apuesta "inequívocamente por el refuerzo del sistema público de pensiones y por el modelo de reparto y solidaridad intergeneracional".
"El modelo de reparto tiene su viabilidad asegurada siempre y cuando seamos capaces de tomar las decisiones oportunas para ello y el Gobierno está decidido a adoptarlas, abierto al máximo diálogo", ha sentenciado.