Esta caída, que confirma la tendencia bajista de los últimos meses en este negocio, es muy inferior a la que se ha producido en el mismo trimestre en el mercado de coches nuevos, que fue de un 43,1%.
Este desfase explica que en la actual estructura del mercado automovilístico español, por cada coche nuevo que se matricula, se vende 1,6 de ocasión, la proporción más alta en favor de éstos de los últimos años y dos décimas superior a la del cierre de 2008.
Así, el mercado de ocasión del automóvil español recorta distancias con los principales países fabricantes de vehículos de la Unión Europea, situándose a tan solo tres décimas de Alemania y cinco de Italia.
No obstante, países como Francia o Reino Unido están todavía lejos de estos parámetros, pues acumulan un diferencial de 1,1 y 1,6 puntos, respectivamente.
La crisis también se ha cebado en el mercado de los VO, como lo prueba que la facturación de esta actividad entre enero y marzo retrocede en términos interanuales un 12%, con una cifra de negocio de 1.720 millones de euros a 31 de marzo.
El comportamiento del mercado de vehículos usados en esta primera cuarta parte del año ha llevado a Ganvam a pronosticar un cierre del actual ejercicio con un descenso del 10%-15%.
Por canales de ventas, los particulares concentraron más de la mitad de las compras (54%), mientras que el 31% se canaliza directamente desde las redes oficiales de concesionarios.
Los compraventas independientes acaparan un 14%, mientras que las empresas alquiladoras apenas representaron un 1% de las ventas totales.
La supresión del Plan Prever, que suponía un incentivo alentador al achatarramiento de vehículos, ha impactado de forma negativa sobre la edad del parque.
De este modo, seis de cada diez vehículos usados vendidos en el primer trimestre en las redes oficiales y vendedores independientes tenían ocho o más años de antigüedad.
En cuanto al tipo de vehículo, la gama baja y media-baja capitaliza las ventas en este mercado, ya que siete de cada diez unidades pertenecen a este segmento, frente a los vehículos de gama media-alta, que representan el 21% y los del segmento alto el 6%.
Por zonas geográficas, las comunidades autónomas que tienen un mayor peso en el mercado nacional de usados son: Madrid, que concentra el 18,5% de las ventas, seguida de Andalucía, con un 15,2%; Cataluña, con un 14,7% y la Comunidad Valenciana, con un 9,5%.
Las menos representativas son: Ceuta y Melilla, con apenas un 0,5% de las ventas nacionales, así como Cantabria y Navarra, con un 1,1% y 1,4%, respectivamente.
Todas las comunidades registraron una caída en sus ventas de vehículos usados, siendo las más significativas la Comunidad Valenciana (-21%), Canarias (-17,5%), Cantabria (-17,5%), Cataluña (-17,4%), Extremadura (-16,4%) y Andalucía (-14,9%).
Las caídas menos acusadas fueron las registradas, por este orden, en la Comunidad de Madrid (-0,5%), Murcia (-5%), Castilla-La Mancha (-6,5%), País Vasco (-7,1%), Aragón (-7,4%) y Castilla y León (-7,6%)
Las ventas de turismos de ocasión procedentes de fuera de España retrocedieron un 52,8% en el primer trimestre del año, hasta situarse en 8.052 unidades, de las cuales el 64,6% recayó en tan solo cinco marcas. En los dos últimos años, las importaciones de usados bajaron un 71,5%.