La banca coincide con Fernández Ordóñez en que debe haber menos entidades y oficinas

AGENCIA EFE 21/04/2009 08:26

Premiar a las oficinas más productivas y reducir el número total de sucursales para rebajar costes de explotación fue una de las medidas que Fernández Ordóñez propuso esta mañana a las entidades financieras durante su intervención en el Encuentro del Sector Financiero organizado por el diario ABC y la consultora Deloitte.

En este encuentro, el director general de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), José Antonio Olavarrieta, aportó el "primer buen dato" para el sector en esta crisis: la reducción en marzo de la morosidad de las cajas de ahorro hasta el 4,65%, desde el 4,85% registrado en febrero.

En la apertura de esta jornada, el gobernador del Banco de España insistió en que la reestructuración del sector bancario pasa por que se produzcan fusiones "de todo tipo", aunque "no dirigidas", sino decididas por las propias entidades implicadas.

Fernández Ordóñez aseguró que cuando defiende la reestructuración del sector no sólo se refiere a las cajas de ahorro, sino a todas las entidades de depósito españolas.

El gobernador dijo que ha mantenido una conversación con la ministra de Economía, Elena Salgado, quien coincidió con él en la necesidad de que crear un "instrumento de gestión" que no haga necesaria la convocatoria del Consejo de Ministros en procesos como en la reciente intervención de Caja Castilla-La Mancha (CCM).

En aquella ocasión, el pasado 29 de marzo, el Consejo de Ministros se reunió para aprobar un decreto ley por el que Estado avala la financiación de la caja por parte del Banco de España.

Según Fernández Ordóñez, en la creación de este instrumento que facilite las reestructuraciones es "donde hay que concentrar los esfuerzos".

El gobernador rechazó hablar de forma explícita de una reforma de la ley de cajas y señaló que cuestiones como los derechos políticos, las cuotas o el papel de las comunidades autónomas "requieren una discusión y un debate tranquilo y separado".

En el debate sobre la reestructuración entró también el consejero delegado del Santander, Alfredo Sáenz, quien advirtió de los riesgos de recapitalizar instituciones no solventes.

Sáenz destacó la importancia de recompensar las actuaciones prudentes y se mostró contrario a "regalar dinero sin condiciones" a las entidades que han cometido errores, además de apostar por que se permita a los bancos "bien" gestionados comprar entidades con problemas.

Fernández Ordóñez advirtió de que la tasa de morosidad seguirá subiendo, y por eso reclamó a bancos y cajas que otorguen sus créditos "con cautela", pero eviten también imponer reglas "indiscriminadas" a la hora de dar financiación.

A este respecto, el consejero delegado del Banco Popular, Roberto Higuera, abogó por conceder créditos "con prudencia" y ayudar a los mejores clientes o a los que tengan problemas pero cuenten con "posibilidades de sobrevivir".

Según Higuera, el Popular se ha anticipado a la sugerencia de Fernández Ordóñez de reducir el número de oficinas y ajustarse al nuevo ciclo con "austeridad".

Directivos de algunas de las principales cajas de ahorros coincidieron asimismo en reconocer que la gestión de la crisis pasa por reducir las dimensiones del sector.

El director general de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), Roberto López Abad, admitió que las redes de oficinas son "disparatadas" en términos de eficiencia comercial.

Según un informe que la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas) elaboró en 2007, España era entonces el país con mayor número de sucursales por habitante, con 95,87 oficinas por cada 100.000 personas.

En esta primera jornada del encuentro, que prosigue mañana, intervino también el director general de La Caixa, Juan María Nin, quien explicó que esta entidad confía en la internacionalización y en la expansión exterior para superar la crisis económica y financiera.