La Comunidad critica que Serrano no renuncie a la presidencia de la Comisión de Caja Madrid

AGENCIA EFE 14/04/2009 07:54

Según fuentes de la Comunidad, su prioridad es la "normalización" del funcionamiento de la Caja, por lo que ha procurado que hoy asistieran todos los integrantes de la Comisión a la misma, que de nuevo presidió hoy Serrano, al que no reconoce esa legitimidad.

Al respecto, las fuentes destacaron que, en la reunión de esta tarde, el representante de la Consejería de Economía y Hacienda en la Comisión de Control le transmitió a Serrano que no puede ostentar la presidencia al no haber sido legítimamente elegido y después del acuerdo unánime logrado la semana pasada para que ocupara ese cargo la persona de mayor edad de ese órgano.

La actitud de Serrano "contrasta poderosamente" con la del "legítimo" presidente de la Comisión hasta la semana pasada, Pablo Abejas -afín a Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid-, quien dimitió para buscar la "normalización", precisaron las fuentes.

Según explicaron, la posición mantenida por Serrano también ha llevado a "varios miembros de la Comisión (PP, IU y CCOO-Madrid) a que pidieran que constara en acta esa "ilegalidad".

La Comisión de Caja Madrid acordó hoy volver a reunirse el próximo jueves presidida nuevamente por Fernando Serrano, a pesar de las críticas de buena parte del órgano de gobierno de la entidad que pedía su dimisión.

El encuentro de esta tarde estuvo liderado por Serrano, después de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid levantara ayer la suspensión cautelar que le impuso el Ejecutivo de Esperanza Aguirre a mediados de enero y que le impedía actuar como miembro de la Comisión de Control de la caja.

La reunión, que empezó a las 16.00 horas, fue convocada la semana pasada por el entonces presidente de la Comisión, Antonio Cámara, quien por ser el miembro de mayor edad ocupaba temporalmente el puesto de Serrano hasta que se levantara su suspensión.

Según las fuentes consultadas por Efe, la presencia de Serrano en el acto y la decisión de asumir las funciones de liderazgo de la Comisión de Control provocó el malestar del sector más próximo a las tesis del Ejecutivo de Esperanza Aguirre, que no le reconoce como presidente.