La conexión energética España-Francia pasa a ser "prioritaria" en la UE

AGENCIA EFE 17/11/2010 14:12

"Las interconexiones en el suroeste de Europa son necesarias porque la península Ibérica no está suficientemente conectada con el resto de Europa", resumió en un comunicado el Ejecutivo comunitario.

En palabras del comisario europeo de Energía, Gunther Oettinger, el principal reto será lograr que haya "una línea que vaya más allá de los Pirineos" y permita que la producción energética española, en especial solar y eólica, y de otros países como Marruecos, pueda ser transportada hasta Europa central.

Habrá que esperar hasta 2012 para contar con una lista concreta de proyectos, pero gracias a la decisión de hoy las propuestas transfronterizas franco-españolas parten con ventaja para conseguir fondos europeos.

Oettinger, quien dio a conocer la medida hoy ante la prensa, destacó la importancia de la integración de redes en Europa y sugirió que las comunicaciones en el caso franco-español no se limiten al trazado terrestre, sino que exploren vías a través del mar Mediterráneo e incluso del Atlántico.

En concreto, Bruselas considera que la interconexión entre España y Francia debería ampliarse desde los 1.400 megavatios actuales hasta los 4.000 MW en 2020.

Además de las interconexiones del suroeste de Europa con el resto de la UE, entre las que figura el paso entre España y Francia, Bruselas quiere impulsar una línea que permita traer la energía eólica producida en alta mar en el norte de Europa a los estados miembros centrales; reforzar las conexiones en los países del centro-este y sureste a través de redes regionales y potenciar la integración en el mercado energético del Báltico en el europeo.

El Ejecutivo comunitario identifica también como prioritario el "corredor sur" con el que prevé traer entre 45.000 y 90.000 millones de metros cúbicos de gas al año desde el Caspio, lo que equivale al 10-20% de la demanda que la UE tendrá en 2020.

También resulta fundamental para Bruselas desde el punto de vista gasístico consolidar la integración del mercado energético del Báltico y fijar una vía norte-sur con la que poder eliminar los cuellos de botella internos que existen en la actualidad.

La Comisión calcula que se necesitarán alrededor de 200.000 millones de euros de inversión para reforzar las infraestructuras eléctricas y de gas hasta 2020.

La mitad de esa cantidad la generará el propio mercado, pero los 100.000 millones restantes precisarán apoyo público y privado.

La CE dará un primer paso en este sentido el próximo junio, cuando propondrá un nuevo instrumento financiero para apoyar proyectos de infraestructuras energéticas de interés europeo con vistas a las nuevas perspectivas financieras a partir de 2013.

Oettinger adelantó hoy que espera contar con alrededor de 800 millones de euros del presupuesto comunitario para los próximos cinco años.

Entre las ideas propuestas hoy por Bruselas, figura también la de agilizar la concesión de permisos de construcción, crear "redes inteligentes" que permitan un ahorro energético real, más eficiencia y mejor integración de las fuentes renovables.

Asimismo, aboga por potenciar las tecnologías de captura y almacenamiento de dióxido de carbono (CO2) y confía en que su desarrollo a escala comercial sea posible en diez años.

La nueva estrategia comunitaria se hace necesaria para cumplir con el triple objetivo de la UE para 2020: reducir un 20% las emisiones de CO2, que el 20% de la energía que se consuma sea de origen renovable y aumentar también en un 20% la eficiencia energética.

Para la organización ecologista Greenpeace, la CE "ha perdido una oportunidad" de desarrollar un mix energético verdaderamente limpio y sostenible al combinar energías renovables en su planteamiento con fuentes fósiles, una idea que comparte WWF.

La Asociación Europea de Energía Eólica (EWEA), por su parte, se ha mostrado satisfecha con la medida, pero asegura que se mantiene a la espera hasta ver si las medidas legislativas que proponga Bruselas el año que vienen mantienen el mismo nivel de ambición.