Al concluir la sesión en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de Petróleo Intermedio de Texas (WTI) para entrega en julio restaron 1,82 dólares al precio de la jornada anterior y cerraron por debajo de 70 dólares por primera vez desde el pasado 8 de junio.
En comparación al viernes de la semana pasada, un barril de petróleo es hoy 2,49 dólares más barato.
Los contratos de gasolina para entrega en julio cedieron diez centavos y finalizaron a 1,92 dólares el galón (3,78 litros), mientras que el precio del gasóleo de calefacción bajó cinco centavos y cerró la sesión a 1,78 dólares/galón.
En el caso del gas natural, los contratos para julio perdieron seis centavos y cerraron a un precio de 4,03 dólares por mil pies cúbicos.
La caída del crudo de Texas se produce después de que el Departamento de Energía de Estados Unidos divulgara esta semana datos que reflejan que la demanda de petróleo y sus derivados en las últimas cuatro semanas fue cerca de un 6% inferior a la que existía el año pasado en las mismas fechas.
Según esos datos, la demanda se ha situado alrededor de los 18,5 millones de barriles diarios, cuando en 2008 se ubicaba en los 19,6 millones.
Estos y otros datos hacen temer a los inversores que la demanda de crudo y carburantes vaya a ser relativamente débil en los próximos meses, lo que desincentiva la inversión en este tipo de contratos.
El barril de crudo llegó a negociarse a 72,3 dólares este viernes en una sesión muy variable en los mercados de valores y en la que el petróleo no consiguió cerrar con avances pese a noticias de nuevos ataques a conducciones petroleras en Nigeria, que suelen hacer subir los precios.