Fuentes sindicales han explicado que en el caso de la planta de Granada ya se hicieron efectivas las salidas de todos los compañeros afectados por el ERE, 53 compañeros en la planta granadina que se acogieron a prejubilaciones o bajas incentivadas, mientras que los últimos afectados por el ERE en Sevilla también han salido en los últimos días.
Han recordado que inicialmente se produjo la salida forzosa de trabajadores, lo que ha provocado que "la mayor parte de trabajadores afectados hayan presentado denuncias individuales ante los juzgados de lo Social", que en el caso de Sevilla han sido siete trabajadores los que presentaron denuncia "pues se les obliga a irse y encima se marchan con menos indemnización", agregaron las fuentes.
Asimismo, han recordado que sigue para adelante el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que se lleva a cabo en Sevilla y en Trubia (Granada).
También han apuntado que el comité de empresa de Santa Bárbara en La Coruña presentó una denuncia contra el ERE ante la Audiencia Nacional, cuya vista oral se celebrará el próximo martes 2 de julio. La actividad de la planta de La Coruña concluye este viernes.
Los trabajadores asimismo lamentaron que, a pesar de estos expedientes, "a situación sigue mala, no se ve futuro a la empresa; no pinta bien y no hay carga de trabajo nueva".
POSICIÓN DE LA EMPRESA
Por su parte, fuentes de la empresa han indicado a Europa Press que "en general la aplicación del ERE se ha llevado a cabo, como era previsible con normalidad, no ha habido mayores incidentes".
No obstante, reconocen que "se han abren dos vías judiciales, la denuncia de La Coruña ante la Audiencia Nacional contra el ERE, y las demandas individuales presentadas ante los juzgados de lo Social".
En ese sentido, Santa Bárbara, que espera que la Audiencia Nacional dicte sentencia a lo largo de julio, defiende la "racionalidad y las causas del ERE, pues creemos que esta ajustado a derecho y pensamos que se ha efectuado de forma correcta, ajustando la plantilla a la carga de trabajo que tenía".
Han agregado que las demandas individuales deberán esperar a que se pronuncie la Audiencia Nacional, que se debe pronunciar ante el ERE en general. En ese sentido, precisan que "cada uno, dentro de ese ERE puede haber circunstancias personales que se verán en cada juzgado de lo social".
"Estamos muy tranquilos, hemos hecho el trabajo de manera razonable para que la empresa se ajustara y las causas que requirieron de esa medida son demostrables", han agregado fuentes de la empresa, quienes muestran su "confianza en que, aun siendo durísimos y muy complicados, creemos que lo hemos hecho razonablemente bien, con vistas a seguir manteniendo la empresa y asegurar su viabilidad a largo plazo".
Precisan que "la situación sigue siendo complicada, por lo que nos hemos ajustado la carga de trabajo que tenemos".
LOS DATOS
En concreto, en la planta de Granada, con una plantilla inicial de 128 trabajadores y una necesidad de ajustes de 45, un total de 53 empleados se han presentado voluntarios mediante prejubilaciones o bajas incentivadas. Éstas han sido todas aceptadas aunque han sido por encima de los previsto y, por tanto, no ha habido adhesiones forzosas al ERE.
Por su parte, en la planta de Sevilla, con una plantilla inicial de 228 y una necesidad de ajustes de 74, los voluntarios han sido 62 y, los llamados forzosamente un total de nueve.
De esta manera, han apuntado que a nivel global de los 593 despidos previstos, once menos que las iniciales, voluntarios han sido 458, más del 72 por ciento y forzosos han sido finalmente 135.