El indicador de exportaciones es, según las Cámaras, el único de los índices analizados que experimenta mejoras en el cuarto trimestre respecto a los datos del trimestre anterior, al pasar de -8,9 puntos a -6,1 puntos.
El resto de indicadores (facturación, inversión y empleo) han empeorado respecto al tercer trimestre. Así, el indicador de facturación retrocedió 2,6 puntos, hasta los -33,6 puntos, mientras que el de inversión bajó un punto, hasta -26,1 puntos. La caída más acusada la registró el indicador de empleo, que empeoró 3,3 puntos, hasta los -21,3 puntos.
Por sectores, todos experimentaron retrocesos en la confianza empresarial en el cuarto trimestre. La caída más moderada se dio en el comercio, con una variación de apenas unas décimas, mientras que la más pronunciada se la anotó la hostelería y el turismo, con un descenso de su indicador de confianza de casi cuatro puntos.
Las Cámaras señalan que la debilidad de la demanda sigue siendo el principal factor limitador de la actividad de las empresas (así lo piensan el 81,3%), mientras que el porcentaje de establecimientos empresariales que apunta que las dificultades financieras limitan su actividad alcanza el 44,3%.
Las Cámaras precisan que más del 60% de las empresas constructoras sitúan las dificultades financieras como el principal obstáculo a su actividad, en tanto que para la hostelería y el turismo es la competencia el elemento más distorsionador.