La demanda del primer día se ha repartido tanto entre los bonos a un año como a dos años, en la que es la tercera emisión de la Generalitat en 12 meses, pero la primera en la que no habrá prorrateo, por lo que cada entidad tiene asignados un número limitado de bonos.
Las entidades con más volumen a repartir son La Caixa (1.100 millones) y CatalunyaCaixa (1.000), que junto con Banco Sabadell (400 millones) lideran la lista de entidades aseguradoras y colocadoras, que recibirán comisiones de entre el 2% y el 2,2%, en función del resultado de colocación.
Los bonos se pueden comprar hasta el 14 de noviembre por un importe mínimo de 1.000 euros y uno máximo de dos millones por inversor, con un interés del 4,75% a un año y del 5,25% a dos años.
La emisión se desembolsará a los compradores el 21 de noviembre, coincidiendo con el vencimiento de la que realizó el Govern tripartito hace un año por 3.000 millones en bonos a un año.
La otra emisión de los últimos 12 meses fue ya del Govern de Artur Mas, que en abril colocó 3.200 millones en bonos a uno y dos años.
Los tipos de interés de los bonos actuales son superiores a los de la emisión de abril, cuando fueron del 4,25 y 4,75%, y que la Generalitat pretendía mantener, pero que finalmente ha aumentado porque las calificaciones de Cataluña han retrocedido.
El primer día de la emisión de finales de 2010 se captó demanda por más de 1.000 millones, y en la de abril de este año por 780 millones.