En concreto, un total de 1.350 explotaciones formaron parte de la primera fase del plan y redujeron su producción de leche en 27.010 toneladas en el último trimestre de 2016, con respecto al mismo periodo del año anterior. Posteriormente, 100 explotaciones españolas se han adherido al programa de ayudas en el segundo periodo, representando una reducción en este caso de 236 toneladas.
Según los datos definitivos aportados por los Estados miembros y publicados por Bruselas, la reducción de las entregas de leche en el conjunto del bloque comunitario alcanza las 861.000 toneladas, de un total de 48.288 productores europeos.
El impulso a las reducciones voluntarias de producción de leche forma parte del segundo paquete de 500 millones de euros aprobado por la Unión Europea. De esta cantidad, 150 millones están destinados a fomentar una menor producción para apoyar la recuperación de los precios.
En virtud de este programa, los productores reciben 14 céntimos por cada kilogramo de leche menos que han producido, con respecto al mismo periodo del año anterior. Las cantidades son calculadas sobre la disminución real y no sobre la cantidad prevista, sobre la base de los datos aportados por las autoridades nacionales.
La Comisión Europea ha destacado el "claro éxito" que ha supuesto esta medida, que no había sido aplicada antes. Así, ha afirmado que el precio de la leche ha experimentado una "rápida e inequívoca" recuperación en los últimos meses, hasta alcanzar los 33,7 céntimos por kilogramo de media en toda la UE.