Fuentes de la caja explicaron a Efe que FCC se quedará con el 30,023 por ciento del capital, en tanto que Caja Madrid controlará el 27,65 por ciento, participaciones que se derivan del reparto de las acciones del holding disuelto más las acciones que ya tenían en Realia de forma directa.
La operación responde a la necesidad de reorganizar la estructura accionarial de Realia para facilitar sus vías de financiación y potenciar su crecimiento, marco dentro del que estudian la posible incorporación a la inmobiliaria de algún nuevo socio con una participación significativa y estable.
Asimismo, esta estrategia contempla la posibilidad de aumentar los fondos propios de Realia, como complemento a la financiación ajena.
Una vez disuelta RB Business Holding, las dos empresas han confirmado su compromiso de mantener su participación de Realia durante cinco años, a contar desde que Realia comenzó a cotizar en junio de 2007.
Además, ni Caja Madrid ni FCC podrán pignorar o poner otra carga sobre estas acciones sin el consentimiento previo de la otra.
Ambas compañías mantendrán una representación paritaria en el consejo de Realia ya que ostentarán el mismo número de representantes en el órgano de gobierno de la inmobiliaria.
El pacto también establece que, para mantener un "free float" (capital que cotiza libremente en el mercado) similar al anterior a la disolución de RB Business Holding, ninguna de las dos empresas superará el 30,5 por ciento del capital durante el mencionado periodo de cinco años.
No obstante, Caja Madrid podrá adquirir acciones de Realia sin ejercer los derechos políticos y siempre que esas compras se realicen como consecuencia de la actividad propia de banco de negocios o de la prestación de servicios para terceros clientes.
Una vez finalizado el periodo de cinco años en los que ambas compañías se han comprometido a mantener su participación y a no superar el 30,5 por ciento respectivamente, se establece la posibilidad de que por primera vez en junio de 2012, y a partir de ahí en la misma fecha cada dos años, cada empresa pueda ofrecer a la otra comprar sus acciones.
FCC y Caja Madrid habían pactado el pasado 31 de diciembre modificar su relación contractual respecto a Realia, con la pérdida del control de la sociedad holding por parte de la constructora.
No obstante, en este pacto se contemplaba la posibilidad de, si concurrían determinadas circunstancias, disolver la sociedad RB Business Holding, cuyas acciones se dividirían a partes iguales FCC y Caja Madrid.