El consejero delegado de Ferrovial, Íñigo Meiras, considera que Aena "siempre será un activo interesante", si bien asegura que el operador de aeropuertos españoles recientemente privatizado está "fuera de la estrategia de inversión" de la compañía a corto plazo.
El grupo que preside Rafael del Pino fue uno de los inversores seleccionados en octubre de 2014 como socios de referencia de Aena, para formar el 'núcleo duro' de esta compañía, a través de un concurso en el que se comprometió a tomar un 6,5% de su capital a un determinado rango de precios.
No obstante, su compromiso de compra quedó sin efecto al superar el precio de 58 euros por acción fijado para el estreno de Aena en Bolsa el máximo de 48,66 euros que Ferrovial pactó pagar por los títulos del operador.
Meirás atribuyó su decisión de finalmente no entrar en el grupo de aeródromos acudiendo a la oferta pública de venta de acciones (OPV) por considerar que se trataba de una operación "forzada, dado los niveles de valoración" que alcanzó.
"Ya nos costó tomar la decisión de entrar en Aena, en la que pretendíamos hacernos con una participación minoritaria para conocer la compañía", detalló. "Íbamos ya forzados y después (tras quedar fuera del 'núcleo duro') decidimos que a esos niveles de valoración era aún más forzado", añadió con ocasión de la presentación de los resultados anuales del grupo de construcción, servicios y concesiones.
No obstante, "Aena siempre será un activo interesante" para Ferrovial, según aseguró Meirás, que auguró que, en línea con lo ocurrido con otros operadores de aeropuertos occidentales, Aena acabará siendo totalmente privatizada.
ALIANZA CON FIRST GROUP PARA COMPETIR CON RENFE.
Tras desistir de entrar en Aena, Ferrovial sigue pendiente de la próxima apertura a la competencia del transporte de viajeros en tren en España, anunciada por el Ministerio de Fomento para la segunda mitad de este año.
La compañía, una de la diez empresas que cuenta con licencia de operador ferroviario, tiene una alianza con la británica First Group, para entrar en un mercado en el que, según Meirás, "salen los números" si Adif reduce el canon que cobra por circular por las vías y usar las estaciones.
Fomento ha diseñado una liberalización gradual del sector, de forma que en una primera fase, de unos siete años, sólo dará entrara a un operador privado, que sólo podrá competir con Renfe en un corredor, el AVE Madrid-Levante.